BARCELONA, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
El líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, ha afirmado este martes que los populares están "en condiciones" de liderar la oposición en este 2014 y aspirar a gobernar tras las elecciones municipales de 2015.
En un desayuno con periodistas y en rueda de prensa de inicio de año, ha defendido que el PP está en "casi paridad" con el PSC y CiU, con lo que ha vaticinado que este nuevo año los populares serán una fuerza determinante en el Ayuntamiento.
En cuanto al PSC, la segunda fuerza en el consistorio, ha subrayado su desbarajuste y que casi tiene más candidatos a las primarias del partido que concejales, y le ha reprochado que las primarias las plantea para hacer política, mientras que "Barcelona ha dejado de ser prioridad".
Del Gobierno municipal de CiU ha criticado la deriva independentista del alcalde, Xavier Trias, y le ha acusado de haberse convertido en "la marca blanca de la continuidad de los anteriores tripartitos" porque, en su opinión, no está ejecutando el cambio que prometió.
Además, cree que el alcalde "ha perdido el perfil transversal" con el que se presentó a las municipales de 2011, lo que le permitía recabar votos de distintos ámbitos, y lo ve más cercano al perfil del presidente de la Generalitat, Artur Mas.
Ante ello, Fernández Díaz se ha presentado como la tercera vía entre los tripartitos y Trias, que por ahora nadie ha materializado: "Queremos un cambio real y no ser la marca blanca desde la cara amable", ha dicho en referencia a CiU.
Al planteársele cómo puede liderar la oposición si ha facilitado la gobernabilidad a Trias, con acuerdos presupuestarios y de aspectos como el Plan de Usos de Ciutat Vella, el popular ha destacado que son "sin connotación ideológica" y afectan a todos por igual.
Ha agregado que el PP tiene la capacidad de llegar a acuerdos, liderar la oposición con iniciativas alternativas de gobierno y fiscalizar la actuación del Ayuntamiento, y todo ello con un grupo municipal "cohesionado ideológicamente".
DEBATE DEL ESTADO DE LA CIUDAD
Fernández Díaz ha trazado diez ejes que abordará este año, y entre las primeras medidas figura pedir a los demás grupos celebrar un debate monográfico del estado de la ciudad, en un pleno extraordinario o como punto de uno ordinario, pero con participación ineludible de Trias.
Quiere así que Trias defienda sus proyectos y prioridades, y no se esconda tras iniciativas como la cuestión de confianza que le ha permitido aprobar las cuentas de 2014, gobernar por decreto y hacer que del alcalde de la mano tendida haya pasado a "alcalde absolutista".
"Hasta ahora sabemos que ha convertido Barcelona en pieza del puzzle independentista", ha criticado el popular, que considera que las prioridades son otras y por las que peleará, como luchar contra la crisis y apostar por una Barcelona abierta, plural y cosmopolita.
Entre otras de sus prioridades figuran revisar el plan de seguridad y la ordenanza de civismo, un nuevo plan de inmigración, la exigencia ante la Generalitat y el Estado, y garantizar la ejecución de las inversiones que Trias ha puesto en marcha, muchas pactadas con el PP.
En el aire sigue si la operación de aparcamientos tendrá el apoyo del PP, pero ha advertido de que con la privatización de Serveis Funeraris (SFB) "no hay nada que hacer" y ha apuntado a que en la estación de La Sagrera debe priorizarse el soterramiento de vías y aparcar la estación.