BARCELONA, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
La exposición 'El arte de comer. De la naturaleza muerta a Ferran Adrià' reflexiona, a partir de este martes en La Pedrera de Barcelona, sobre la relación entre arte y gastronomía con piezas que van desde bodegones del siglo XVI hasta la contemporaneidad de Miquel Barceló, pasando por cuadros de René Magritte y Pablo Picasso, entre otros.
La muestra reúne 130 obras de 76 artistas y se divide en cuatro ámbitos diferenciados en los que se pueden encontrar la representación de la naturaleza muerta, el arte conceptual y el alimento como elemento artístico, los artistas que han utilizado sus propios restaurantes como centros culturales de promoción del arte, y un espacio dedicado a la figura del cocinero Ferran Adrià como generador de creatividad y obras inspiradas en su trabajo.
El director de Cultura de la Obra Social de Caixa Catalunya --entidad impulsora del proyecto--, Àlex Susanna, ha explicado en rueda de prensa que la exposición tiene como objetivo mostrar la "pervivencia y enorme vitalidad del género" y mostrar cómo, transformándose, se ha mantenido fiel a su origen.
'El arte de comer' ofrece una amplia visión de la intensa relación entre arte y gastronomía, así como la consolidación del género de la naturaleza muerta especialmente a partir de las diversas manifestaciones artísticas creadas a partir de los años 60 y 70 cuando la comida y el acto de comer irrumpen en la obra de artistas que buscan experimentar e ir más allá de la representación imitativa de la realidad.
El trabajo de artistas como el indio Subodh Gupta, el inglés Ben Nicholson, el español Juan Gris y el catalán Salvador Dalí demuestran que "los elementos culinarios son pretextos para analizar la realidad y la época en que vivieron", ha señalado Susanna.
El recorrido --que se configura a través de salas cuyas pinturas y esculturas se relacionan "por su contenido o a nivel formal"-- se centra en las investigaciones de los artistas en el ámbito de la composición, la metafísica y la poética, con obras que presentan la crueldad del sacrificio de animales y la uniformización de la cultura a través de bebidas, como el trabajo de Cildo Meireles que critica la Coca-Cola con el lema de 'Yankees go home'.
Además, la exposición reivindica la figura de Adrià y su papel como generador de arte, no tanto por sus propias creaciones sino más bien por ser fuente de inspiración de fotógrafos como Hans Gissinger --que fotografía las texturas del agua--, Bruno Montovani --que compuso una pieza musical tras cenar en El Bulli-- y Franscesc Guillamet, cuyas fotografías de los platos del restaurante "tienen un valor artístico intrínseco pero también un valor histórico", ha asegurado Susanna.
La frase del cineasta Peter Kubelka, que cierra la exposición, retrata con claridad la voluntad de 'El arte de comer': "Cocinar es la actividad más antigua del ser humano. Cocinando, las personas expresan su visión del mundo".
