El artista Julio Vaquero pinta de oro y alquitrán 'El final de las apariencias'

'El Final De Las Apariencias', De Julio Vaquero
ARTS SANTA MÒNICA
Actualizado: jueves, 5 mayo 2011 16:16

BARCELONA, 5 May. (EUROPA PRESS) -

El pintor realista Julio Vaquero presenta en Barcelona 'El final de las apariencias', una ambiciosa instalación escultórica que expone después de cinco años de trabajo y que representa, con oro y alquitrán, "el horror del tiempo".

El nuevo trabajo de Vaquero protagoniza una exposición doble que se podrá ver hasta el 25 de septiembre y que comparten el Arts Santa Mònica (Asm) y la galería Trama, que inaugura un nuevo espacio.

Vaquero ha explicado este jueves en rueda de prensa todos los entresijos de esta obra, un proyecto innovador en su carrera, ya que, por primera vez, el modelo que él toma siempre para pintar sus cuadros se convierte en la verdadera obra de arte.

A primera vista, 'El final de las apariencias' se compone de varios muebles --una cama, una mesa, varios armarios y una lavadora, entre otros-- pintados de oro y abollados, pero lo que se ve es, en realidad, pintura moldeada, un nuevo material inventado por Vaquero tras meses de pruebas.

El artista buscaba un material lustroso que al solidificarse se pudiera moldear, y mezclando varios componentes, y tras seis meses de trabajo, consiguió construir objetos que se sostuvieran de pie, pero que al mismo tiempo tuvieran un aspecto "frágil y quebradizo".

"Yo todavía necesito que la parte artesanal se haga sentir, que esté visible", ha confesado el autor, que estuvo dos años trabajando con los objetos y expuesto a unas emanaciones tóxicas que le provocaron una enfermedad respiratoria.

Finalmente, el resultado de la obsesión de Vaquero son unos objetos dorados que vomitan alquitrán y que están dispuestos entre dunas de un polvo hecho con restos de ruedas de coche, una metáfora, según el artista de que el alquitrán --"la sangre del siglo XX"-- parece engullir todo el oro.

Aunque la instalación que se ve en Arts Santa Mònica es la parte más llamativa de la exposición, la muestra también reúne los dibujos que el pintor realizó durante su dolencia tomando esos 'muebles' como modelo.

La serie de dibujos --que también llenan la galería Trama-- incluye trabajos más realistas, otros más borrosos y piezas de gran formato en la que se recrea la atmósfera de los objetos con brumas, sombras y espacios de luz.

El desembarco del realismo en el centro de arte de La Rambla no debe interpretarse, según su director, Vicenç Altaió, como una reivindicación, aunque sí que ha reconocido que es una disciplina "ignorada y despreciada" en la sociedad del conocimiento.