Hereu reprocha a la Generalitat que no puede recortar la L9 y la contaminación a la vez
BARCELONA, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona ha realizado reformas en 1.705 calles --367 de forma integral-- en este mandato 2008-11, invirtiendo 249 millones de euros, cifra que representa el doble de lo que destinó al espacio público el anterior Gobierno municipal.
Lo ha explicado el alcalde, Jordi Hereu, en la presentación del Plan de Mejora Integral del Espacio Público 2008-2011, en que ha asegurado que el consistorio puede permitirse la inversión por su solvencia y contribuye a combatir la crisis, por lo que exigirá "a otros que no dejen de invertir".
Con las reformas, ha pretendido mejorar aspectos del espacio público como aceras y cloacas, garantizando su adaptación para discapacitados y ancianos, por lo que se han instalado nueve escaleras mecánicas y 14 ascensores en 61 calles.
La mejora de la accesibilidad ha conllevado la transformación de 142 calles en plataforma única, que elimina las aceras para facilitar la movilidad y prioriza a los peatones, permitiendo también la circulación de vehículos.
El consistorio ha soterrado 120 kilómetros de redes de servicios --mediante el estímulo a las compañías y asumiendo parte de la financiación--, especialmente de la línea de baja tensión, aunque todavía hay 350 kilómetros instalados en el exterior.
En este mandato se han asfaltado más de un millón de metros cuadrados de calzada, el 47 por ciento de los cuales se han pavimentado con material sonorreductor, que disminuye el ruido entre uno y tres decibelios.
Se ha utilizado pavimento pétreo y de piedra prefabricada en 59.558 metros cuadrados, y el consistorio ha colaborado con entidades y universidades para desarrollar nuevas técnicas de asfaltado, como la que permite reducir de 160 a 80 grados el proceso de pavimentación.
Las mejoras en iluminación han permitido descontaminar 27.000 puntos de luz y renovar 10.189 farolas, eliminando la contaminación lumínica emitida por las luces públicas y tratando ahora de reducir la producida por la iluminación ornamental de diversos edificios.
MENOS POLUCIÓN, UN "RETO"
Hereu también ha destacado que Barcelona es una de las ciudades europeas con más árboles en sus calles porque, de los 231.899 que hay en la ciudad, 153.700 están en las vías, y ha resaltado que contribuyen a reducir la concentración de CO2.
Ha remarcado que la calidad medioambiental de la capital catalana es "un reto", y que los vehículos privados son un importante agente contaminante, por lo que se debe potenciar el transporte público.
Por ello, ha advertido de que la solución no pasa "por parar la inversión en Metro ni en Rodalies, sino todo lo contrario", y ha lamentado que la Generalitat pida rebajar la contaminación y a la vez pretenda reducir las estaciones de la Línea 9 del Metro.
