Advierte de que hablar de no aumentar salarios sería injusto ante el incremento de costes y precios
BARCELONA, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Pimec, Antoni Cañete, ha asegurado que la reforma laboral aprobada por el Gobierno es "estética" y no estructural, y considera que tiene mucho margen de mejora.
Lo ha dicho este lunes en una entrevista de Ser Catalunya recogida por Europa Press, en la que ha criticado que la reforma "no se adapta a las necesidades" del mercado laboral, teniendo en cuenta los cambios que se están viviendo.
"Decimos que es una reforma que no tiene profundidad porque no aborda las políticas activas", ha asegurado, ya que de los 4.000 millones que se destinan a políticas activas y pasivas solo se dedican un 17% a las primeras, según datos de la propia patronal.
También ha dicho que esta reforma reducirá la temporalidad pero hará una reducción que aún es "peor", que es la de la ocupabilidad, y ha dicho que la temporalidad es consecuencia de la rigidez del mercado laboral.
"Lo que tenemos es un cambio en el mercado que, si no tenemos la flexibilidad para darle respuesta, y lo hacemos rígido, el problema que tenemos es que lo que estaremos perdiendo serán oportunidades y condicionando de alguna forma nuestro futuro", ha añadido.
PYMES
Cañete también considera que las pymes no tienen una representación adecuada, ya que suponen más del 99% de las empresas, el 75% de empleo y el 60% del PIB.
"El hecho de que no haya una participación en la negociación colectiva de la pyme, que es el 75% de empleo de todo el país, es una evidencia de la carencia de poder dar soluciones a los problemas que tienen las empresas", ha sostenido.
Ha dicho que esto solo ocurre a nivel estatal, ya que en Catalunya el mapa patronal está homologado a Europa, donde hay representación de la pyme, y ha argumentado que Cepyme es una marca y no un agente con voz propia.
"RETROVISOR"
Cañete considera que se mira la reforma laboral a través del retrovisor, cuando se debería mirar hacia adelante par dar respuesta a los cambios que se han producido en la sociedad y el mercado laboral.
"Son tan grandes que no somos conscientes y, por tanto, debemos poner encima de la mesa una reforma que nos permita una flexibilización para poder dar respuesta a estos cambios que se producen", ha señalado.
Considera que hay que dar seguridad y flexibilidad, algo que ha definido como 'flexiseguridad', y que según él no se ha tenido en cuenta en esta reforma laboral, cuyo real decreto-ley entró en vigor el 31 de diciembre.
TRÁMITE PARLAMENTARIO
Ha dicho que el hecho de que haya habido un acuerdo dentro del diálogo social es un elemento positivo pero no suficiente, y confía "plenamente" que su trámite parlamentario lo que pueda hacer es mejorar esta propuesta que se está haciendo.
Ha explicado que piden estas mejoras a todos los partidos pero que ERC parece ser que tendrá la llave para poder hacer que se cambien cosas: "Aquí nosotros lo que reclamamos es que, quien tenga la llave, la utilice".
Preguntado por los salarios, Cañete ha dicho que ante el aumento que está teniendo el coste de la energía y el aumento, como hacía tres décadas que no se tenía, del IPC, "hablar de no aumentar salarios sería una medida absolutamente injusta. No nos la podemos plantear desde el ámbito económico".
"Que las empresas empiecen a tener en consideración su productividad, aumentar los salarios sin aumentar la productividad de las empresas sería pegarse un tiro en el pie porque cerrarían empresas", ha advertido.
