BARCELONA, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Diputación de Barcelona, Mercè Conesa, ha pedido este miércoles no aceptar "la condición de censura y la condición de sumisión en pleno siglo XXI", y no permitir una regresión de los derechos y libertades de la sociedad.
"Tenemos que decir una vez más que no podemos permitir ni podemos dar un paso atrás en relación con los derechos políticos, civiles y humanos", ha aseverado Conesa en la clausura del seminario organizado por la Diputación 'Enric Prat de la Riba (1870-1917). Home de pensament, d'acció i de govern'.
Ha dicho que, si se acepta la censura y la sumisión, la sociedad no será digna de ser heredera de la memoria colectiva que se construyó desde la Mancomunitat de Catalunya con Prat de la Riba al frente, en un momento en que "seguramente sus posibilidades de vislumbrar la libertad democrática no eran como las de hoy".
"CONFLICTO" CON EL GOBIERNO
"En el momento que estamos viviendo, de un conflicto muy grande con el Gobierno del Estado español, tenemos que plantearnos como país cuáles son las bases que son inalienables" en la sociedad, como los Derechos Humanos, la democracia, y los derechos políticos y civiles, ha defendido Conesa.
Ha avisado de que no se debe renunciar "a los sueños, a los derechos y a las libertades porque, como son inherentes a la persona, nadie los puede quitar", y ha asegurado que seguirán trabajando para recuperar la memoria histórica de la figura de Prat de la Riba y de su legado.
La presidenta de la Diputación ha destacado que Prat de la Riba contribuyó a modernizar la sociedad desde la Mancomunitat y que, un siglo después, siguen vigentes servicios que impulsó y actualmente se entienden como derechos ya garantizados, como el acceso a la educación y la cultura mediante la red de bibliotecas.
Ha resaltado que la modernización de un país se impulsa desde muchas voluntades que se unen por objetivos concretos, y que las voluntades que se reunieron entonces han dejado su huella un siglo después: "La Diputación de Barcelona puede presentar una carta de servicios inspirados en los que hace 100 años defendió" Prat de la Riba.
Conesa ha expresado su orgullo por este legado y por haberlo sabido transformar para adaptarlo a la evolución de la sociedad, que debe renovar objetivos para progresar y fijar como bases inalienables la democracia y los derechos, según ella.
