LLEIDA, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El Cuerpo de Agentes Rurales ha denunciado a tres fotógrafos sin autorización que se encontraban dentro de un cantador de gallos silvestres en el Pallars Jussà (Lleida), ha informado este miércoles la Conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural en un comunicado.
Los fotógrafos estaban en una tienda de camuflaje en medio del mismo cantador cuando los agentes les sorprendieron mientras efectuaban un servicio especial de vigilancia en zonas de canto de gallo silvestres, una especie que está en regresión en toda Europa y hay partes de la península ibérica donde está en grave peligro de extinción.
La legislación vigente regula las actividades fotográficas, científicas y deportivas que pueden afectar a la reproducción de las diferentes especies protegidas, y únicamente permite el acceso para realizar estudios científicos.
Únicamente en Val d'Aran y el Solsonès también se admite un número muy limitado de autorizaciones para fotografía de naturaleza, pero "siguiendo un estricto protocolo técnico y bajo supervisión de un guía autorizado".
Entre abril y junio, los gallos silvestres inician un proceso reproductivo que se manifiesta en que los gallos machos se ajuntan en los llamados cantadores y se exhiben y se pelean entre ellos para que las hembras puedan escoger al macho más dominante para que las cubra, momento que se considera el más vulnerable para la especie.
Además de denunciar a los fotógrafos, los agentes decomisaron las tiendas y lonas de camuflaje, trípodes y cámaras con teleobjetivos.
