Desmantelada en Tarragona una red de 17 falsificadores de CD y DVD con casi 100.000 copias incautadas

Actualizado: lunes, 25 septiembre 2006 19:26

TARRAGONA, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil detuvo el pasado viernes en Tarragona una importante red de falsificación de CD y DVD a la que se le intervinieron casi 100.000 copias ilegales. En total se detuvieron 17 personas, lo que convierte esta operación en la mayor de toda España.

Desde principios del pasado mes de agosto, el Instituto Armado detectó un fuerte incremento en la venta ambulante y transporte de CD y DVD ilegales, además de recibir varias denuncias de asociaciones de defensa de derechos de autor.

Tras varias investigaciones, el pasado viernes se procedió a entrar en dos pisos de Salou, tres en Reus y otro en Cambrils. En las viviendas se detuvieron a 17 senegaleses de entre 21 y 40 años por un delito contra la propiedad intelectual. Además, se intervinieron 49.370 CD, valorados en 987.400 euros, y 34.994 DVD, valorados en 1.049.820 euros, lo que suma 2.037.220 euros.

Otros objetos incautados fueron 6.800 discos vírgenes valorados en 3.168 euros, 14 torres de grabación con 14 lectores y 106 grabadoras, una fotocopiadora a color industrial, un fax-scanner, cuatro ventiladores para refrigerar grabadoras, siete cajas de papel con 17.500 hojas, 17 cajas de tonner, fundas de plástico para CD y DVD, más de 25.000 carátulas falsas y 17.500 carátulas sin imprimir.

Los detenidos trabajaban de forma organizada, normalmente en horario nocturno, y empleaban un sofisticado sistema de grabación, con 'hardware' de última generación, llegando a falsificar 15.900 unidades al día.

Las viviendas utilizadas para falsificar estaban ubicadas en Salou y Reus, desde donde se distribuían las copias a otros domicilios de las mismas localidades. Sin embargo, en los desplazamientos adoptaban importantes y numerosas medidas de seguridad, cambiando de domicilio con frecuencia para no ser descubiertos.

Estos segundos pisos servían de 'supermercados' a los 'manteros' o vendedores ambulantes de toda la zona. Tras escoger las películas o discos musicales que más salida comercial tenían, los compradores tenían que abonar el importe exigido a la salida del piso, como en cualquier comercio.