BARCELONA, 31 May. (EUROPA PRESS) -
La Generalitat dejará de convocar actos públicos más tarde de las 18.00 horas y promoverá el teletrabajo entre sus funcionarios como ejemplo para fomentar la Reforma Horaria entre los sectores públicos y privados y desde la "responsabilidad que tiene la administración para liderar" transformaciones sociales, ha explicado el presidente del Govern, Quim Torra.
En un acto este viernes, en el que se ha constituido la Comisión de Seguimiento de la Reforma Horaria, Torra ha explicado que se trata de medidas que se incorporarán "de forma progresiva a lo largo de la legislatura" a través de la Conselleria de Presidencia, y que aprobarán el martes en Consell Executiu junto a otras acciones y recomendaciones.
Entre estas, figura la voluntad de cambiar las cenas de representación institucional por desayunos y comidas, evitar convocar reuniones más tarde de las 16.00 y con las 18.00 como hora final, y promover el cierre de los edificios públicos no más tarde de las 20.00.
Con el fin de garantizar derechos de los trabajadores, blindarán la desconexión digital de estos al fin de la jornada laboral, además de impulsar una flexibilización con "un modelo propio de teletrabajo, a través de la Conselleria de Políticas Digitales y Administración Pública, como una nueva forma de trabajar dentro de la administración de la Generalitat, que rompa con el viejo modelo que tiene en cuenta poco más que la presencia y no el trabajo".
Ha explicado que se contemplará la consecución de objetivos, y que negocian el proyecto con representantes sindicales y se concretará en un decreto en el segundo semestre de este año, a la vez que crearán espacios de 'coworking' y nuevos entornos de trabajo y un nuevo formato de dirección.
Torra ha explicado que la reforma mantiene el horizonte de estar implementada en 2025, y ha destacado que no solo logrará hábitos más saludables, sino que también cambiará la forma de entender el tiempo, y ha recordado cómo, en un periodo en el que vivió en Suiza, recibió una llamada para informarle que la reunión se retrasaba 5 minutos, lo que le sorprendió: "Descubrí que la gestión del tiempo es la gestión del respeto, sobre todo del tiempo de los demás".
El director de la Oficina por la Reforma Horaria de la Generalitat, Alexis Serra, ha explicado que entre junio y noviembre de este año se iniciará un proceso de concertación social, trabajando de forma sectorial en priorizar las medidas del Pacto de la Reforma Horaria y trazar sus líneas principales, con el fin de empezar a aplicarla a principios de 2020.
Prevén validar este plan de transición 2020-2021 en noviembre de este año, con la previsión de aprobarlo en diciembre en Consell Executiu: "Es tiempo de no perder tiempo", ha afirmado, defendiendo que la estrategia llevará a promover la flexibilización de los horarios y fomentar la conciliación personal y familiar, entre otras medidas.
La consellera de Presidencia, Meritxell Budó, ha afirmado: "Es un reto de país y por lo tanto necesita el apoyo y necesita el impulso de todo el mundo, pero sobre todo de todas las administraciones publicas", para que se pueda sumar después el sector privado, y ha asegurado que culminará en una sociedad más integradora, sobre todo transformando roles de mujeres y hombres de forma más equitativa.
El conseller de Políticas Digitales, Jordi Puigneró, ha remarcado el compromiso del Govern por la reforma y ha defendido que "un país digitalmente avanzado necesita una administración" que también lo esté y unos horarios y modelos de trabajo propios del siglo XXI.
En el acto han mantenido una conversación el escritor Mrius Serra y la socióloga Cristina Sánchez, en la que Serra ha reflexionado sobre que "la vida es tiempo" y es necesario ser soberano de este tiempo, en lugar de ser dominado por éste.
Ha alertado de que se parte de un marco mental en el que hacer las cosas tarde estaba bien visto, cerrar el bar tenia cierto prestigio social: "Había una ecuación perversa que lo culturalizaba y decía: es que somos latinos, somos libres", pero después hay países latinos como Italia en los que se come a las 13.00 horas, por lo que no es cierto.
La socióloga ha abogado por una utilización del tiempo compactada, que evite el "llenar agujeros" actual, y ha alertado de que el teletrabajo tiene la problemática de que dificulta la separación de los tiempos, como ha sucedido tradicionalmente con las mujeres que trabajan en casa, ante lo que ha remarcado la necesidad de ser conscientes de cómo se realiza el cambio.