El Govern planta 10.000 árboles de ribera en Aitona y Sers (Lleida)

Trabajos de desarraigado biológico en una antigua chopera de La Granja dEscarp
Trabajos de desarraigado biológico en una antigua chopera de La Granja dEscarp - GOVERN
Publicado: lunes, 9 mayo 2022 18:41

Forestal Catalana inicia los trabajos de desarraigado biológico de una antigua chopera en La Granja de Escarp

LLEIDA, 9 May. (EUROPA PRESS) -

La Conselleria de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, a través de Forestal Catalana, ha plantado 10.000 árboles de ribera como alisos, olmos, fresnos, álamos o sauces en los términos municipales de Aitona y Sers (Lleida).

Los árboles se han plantado en el marco del proyecto de restauración y mejora de hábitats en las riberas de Lleida, ha informado la Conselleria, este lunes, en un comunicado.

Al mismo tiempo, la empresa ha iniciado trabajos de desarraigado biológico en una antigua chopera del término municipal de La Granja de Escarp (Lleida) donde, durante el próximo otoño, se plantarán también unos 12.000 árboles de ribera.

El desarraigado biológico consiste en inocular hongos autóctonos en las cepas para impedir el rebrote y descomponer las cepas.

En una superficie de 15,15 hectáreas de la Granja de Escarp en la que había 3.000 cepas de chopo en malas condiciones, la Conselleria consideró oportuno utilizar este sistema por la reducción del coste de ejecución, la falta de generación de residuos y porque no era necesario el movimiento de tierras que supondría el arranque de cepas de grandes dimensiones.

Según la Conselleria, este desarraigo favorece la biodiversidad fúngica, que supone una mejora para el hábitat de muchos invertebrados y, de paso, para la fauna en general.

El personal técnico del Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), que ha colaborado en el proyecto, ha generado el sustrato necesario en los laboratorios de su sede en Solsona (Lleida).

HONGOS COMESTIBLES

En otoño se podrá evaluar el resultado, se obtendrá gran cantidad de hongos comestibles y se acabarán las labores de plantación en esta zona de unos 12.000 ejemplares de especies de ribera.

En Aitona y Sers se extendían 14,17 hectáreas de antiguas plantaciones de chopo abandonadas que suponían un riesgo para las personas debido a la inestabilidad de los árboles, que se encontraban en muchos casos muertos en pie.

Los técnicos optaron por cortarlos, realizar el desembosque de la madera para utilizarla posteriormente como biomasa, eliminar los restos, realizar el desarraigado mecánico de las cepas de menor diámetro y plantar especies de ribera.