BARCELONA, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
La escritora Helena Cosano acaba de publicar 'Teresa. La mujer' (La Esfera de los Libros), unas memorias ficticias de Teresa de Ávila escritas a punto de morir y que sirven a la religiosa como una confesión general, al definirse como persona, sin las características ni el mito que la hicieron mística y después santa.
"Contaría lo que no escribió en sus obras por mandato de sus directores espirituales" y diría lo que hasta entonces sólo confesaba a Dios, ha explicado la autora a Europa Press, por lo que Teresa de Cepeda y Ahumada se expresa libre de sus superiores y de la Inquisición, cuando ya es anciana y está enferma.
La religiosa reconoce virtudes, pero también flaquezas, dudas y errores, y evoca su vida como una recapitulación e incluso como una confesión de toda su existencia, narrando lo que no pudo reconocer hasta la vejez, y así la narración sirve también de "testamento espiritual".
Según Cosano, esa es la aportación original de este libro, poco antes de acabar el año dedicado al V Centenario del nacimiento, durante el cual se han publicado otros tipos de libros sobre ella: biografías, estudios académicos y novelas históricas.
La escritora cree que hacer hablar a Teresa sobre su vida como mujer contribuye a compensar el hecho de que se ha convertido en un personaje "manipulado por el poder para servir distintas ideologías", interpretado, reinterpretado, malentendido y, a veces, incluso falsificado.
"NUNCA FUE PLENAMENTE LIBRE"
Esta novela la imagina libre del todo porque va a morir y porque ella "nunca fue plenamente libre", pese a ser muy moderna para el siglo XVI: despreciaba las convenciones, la hipocresía de los tratamientos, las jerarquías y la inmoralidad de los valores, pero no los eludía.
"Sus cartas demuestran que, pese a despreciarlo, lo observaba a la perfección", aunque gozase de una inmensa libertad interior, según Cosano.
Estas falsas memorias explican lo que no dicen sus obras por mandato de sus directores espirituales, lo que siempre calló, y da consejos, habla del bien y el mal, de lo humano y --sobre todo-- de lo divino, de lo que le preocupó en su vida, de ángeles y demonios, del sufrimiento del cuerpo, de cómo encontrar la felicidad y de su Dios.
Helena Cosano es también diplomática y traductora; en 1994 ganó el premio de literatura española del Concours Général des Lycées de Francia; en 2004 aprobó el ingreso en la carrera diplomática; después publicó su primera novela, 'Tres reencuentros y nueve días de amor teórico', y un libro de cuentos ('Mariposas'), y durante años compaginó su actividad literaria con la de diplomática, con destinos como Astana y Ginebra.
Sus libros más recientes son 'Cándida diplomática' (2011), 'Almas brujas' (Premio Rubén Darío 2014) y 'El viento de Viena' (2015), Premio Internacional de Literatura Agua y Viento de Buitrago del Lozoya.