Tacha a Rajoy de imperialista por querer convertir las corridas en un bien de interés cultural
BARCELONA, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet, tachó hoy de "cutre" pensar que la prohibición de los toros en Catalunya tendrá un impacto económico en la comunidad, tal y como advirtió este miércoles el ministro de Indutria, Miguel Sebastián, tras expresar su respeto a la ley aprobada por mayoría absoluta en el Parlament.
En declaraciones a Europa Press, Huguet (ERC) ha ironizado sobre los efectos y beneficios económicos de esta fiesta en la comunidad. "Si los toros es lo que nos ha de garantizar el cambio económico, vamos listos", ha subrayado.
El conseller se ha declarado "no especialmente antitaurino ni animalista", pero ha recordado que Catalunya se ha manifestado como un pueblo mayoritariamente animalista, lo cual es reflejo "de una identidad propia y diferenciada" de la de otras naciones españolas.
También arremetió contra el presidente del PP, Mariano Rajoy, que llevará una moción al Congreso para convertir las corridas de toros en bien de interés cultural. Para Huguet, las palabras del líder de la oposición son una muestra de "imperialismo".
"Nos aplican el Decreto de Nueva Planta sistemáticamente", ha reprochado el conseller en referencia a la abolición de las instituciones propias de Catalunya en 1714 por parte de Felipe V. "Ahora, por suerte, no lo hacen con armas, sino con mayorías, tribunales constitucionales, presión mediática y guerra económica", ha añadido.
'SOUVENIRS' CATALANES
Huguet ha destacado la tarea emprendida por el Govern por recuperar las señas identitarias de Catalunya en ámbitos como el comercio, a través de la creación de 'souvenirs' turísticos elaborados por artesanos catalanes.
Ha insistido en que países centralistas como Francia han sabido reconocer que la diversidad de la oferta, la diferenciación, sirven para garantizar que los turistas repitan su viaje para conocer estas diferencias.
En este sentido, ha lamentado que algunos sectores en España interpreten "cualquier acto en positivo para diferenciar la identidad catalana como un gesto que cuestiona otra identidad" --la española--.
