GIRONA, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
El programa de la Diputación de Girona para la instalación de desfibriladores fijos y móviles en los 221 municipios de la provincia ha salvado 38 vidas por paro cardiaco fuera del hospital, con una tasa de uso doce veces más alta en el caso de los móviles, según un informe del ESC Congress Barcelona 2017.
Según ha informado la organización en un comunicado este domingo, el uso de los desfibriladores no es peligroso y han recordado que nunca pueden matar a nadie, sino todo lo contrario, ya que son la única posibilidad de salvar a una persona que haya tenido una muerte súbita o un paro cardiorrespiratorio.
La mayoría de estos dispositivos de cardioprotección se encuentran en poblaciones urbanas, en hoteles, centros comerciales, aeropuertos, centros deportivos, farmacias, mercados, estaciones de transporte e incluso salas de fiesta.
Pero este informe ha recordado la importancia de instalarlos en poblaciones pequeñas, como lo ha realizado la Diputación de Girona desde el año 2011, a través de su dispositivo de salud Dipsalut y con la valoración de la Facultad de Medicida de la Universidad de Girona, que calculó que era necesario instalar 747 desfibriladores fijos y móviles.
El doctor Ramón Brugada del Hospital Universitario Doctor Trueta de Girona, y uno de los autores del estudio presentado en el Congreso Europeo de Cardiología, ha asegurado que se ha comprobado que el uso de estos instrumentos "ha salvado la vida de personas que habían tenido arritmias y que las descargas eléctricas les ayudaron a recuperar su ritmo normal".
Asimismo, ha indicado que se trata de aparatos de fácil uso y seguros, además de que son "muy inteligentes y no se equivocan nunca", aunque ha mencionado que no pueden salvar a todo el mundo, como en casos de ictus, hemorragias digestivas severas o rotura de aorta.
CÓMO USARLOS
Así, ha explicado que hay que quitarle la camisa a la víctima, ponerle los parches tal y como indica el dibujo y después "el desfibrilador lo hace todo, ni siquiera hay que apretar un botón ya que son aparatos automáticos".
También ha señalado que es importante actuar con rapidez y que los pueden utilizar personas "incluso sin formación" en caso de emergencia médica, algo que ya es legal desde el año 2011, puesto que antes se requería una formación específica para manejarlos.
