BARCELONA, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una joven que ha denunciado un pinchazo el último fin de semana en una discoteca de Mataró (Barcelona) ha reprochado el trato del personal de la sala una vez los alertó: "Me sacaron para fuera, me preguntaron qué había pasado, se lo conté y como que me negaron que hubiera pasado eso".
"Me apartaron en unas escaleras de un rincón, me dieron agua y me dijeron que esperara unos 10 minutos y volviera a entrar. Como no me encontraba bien les dije que no quería volver a entrar", ha explicado en una entrevista de TV Mataró recogida por Europa Press.
Ha valorado que "cuando alguien vaya, aunque sea una falsa alarma, tendrían que darle atención médica o llamar a una ambulancia, ayudarle, porque ellos no son médicos para saber qué pasa".
La chica también ha contado que después del pinchazo, que notó en la parte de detrás de la rodilla, se asustó, se mareó y le costaba caminar.
Este caso, que ocurrió la noche del sábado al domingo, forma parte de la más de veintena de pinchazos denunciados las últimas semanas en Catalunya.
SIGUIERON "RIGUROSAMENTE EL PROTOCOLO"
El presidente de la Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (Fecalon), Fernando Martínez, ha replicado que la sala siguió "rigurosamente el protocolo del sector ante los pinchazos", y en declaraciones a Europa Press también ha asegurado se solicitó los servicios de una ambulancia.
Este protocolo incluye dar instrucciones al personal de la sala y de seguridad para que estén alerta a posibles pinchazos, atender a la víctima y hablar con su grupo de amigos para que puedan acompañarla y "ante la menor duda identificar a los acompañantes de la chica para tener la garantía de que está protegida por gente de su entorno".
El protocolo también insta a contactar con los servicios de emergencias "en el caso de que la situación no pueda darse por completamente aclarada o la víctima no recupera plenamente la conciencia" y a conservar las grabaciones de las cámaras de seguridad.