BARCELONA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
La consellera de la Presidencia y portavoz del Govern, Neus Munté, ha rechazado entonar un 'mea culpa' en relación a la actuación del Govern en el caso de los abusos a menores en el Colegio Maristas de Sants-Les Corts de Barcelona, después de que el Síndic de Greuges criticara el martes la falta de coordinación de las instituciones, pero ha afirmado que el Govern se siente interpelado por las recomendaciones del Síndic.
En declaraciones a los medios este jueves --después de la reunión de la Taula del Tercer Sector Social a Catalunya con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont--, la portavoz del Govern ha asegurado la "máxima colaboración" ante las recomendaciones del Síndic, y ha afirmado que el Govern trabaja en mejorar los protocolos y aplicar las propuestas de Rafael Ribó.
La portavoz ha asegurado que los diferentes protocolos se activaron ante los casos de abusos y ha defendido la comunicación existente entre los departamentos de la Generalitat, que tiene "la máxima voluntad de clarificación para llegar hasta el final y ser contundentes con las respuestas que hagan falta", una vez resuelto el caso.
MEJORAS EN LOS PROTOCOLOS
"Requiere de una mejora de los protocolos existentes en esta materia que, como todo, siempre son mejorables", para que todos los organismos que tienen como objetivo final el interés del menor puedan trabajar de la forma más coordinad posible --Fiscalía, cuerpos de seguridad, y los sectores educativo, de salud, de servicios sociales--, ha sostenido.
Munté ha recordado que se trata de unos hechos que se están judicializando, siendo objeto de investigación policial y judicial, y ha llamado a "ser muy cuidadosos con las valoraciones" porque todavía no existen conclusiones --judiciales, policiales y de la Inspección de Enseñanza-- definitivas y determinantes.