Las nucleares Ascó I y Vandellós II registraron incidentes en el segundo trimestre que provocarán medidas correctoras

Europa Press Catalunya
Actualizado: jueves, 27 septiembre 2007 21:24

TARRAGONA 27 Sep. (EUROPA PRESS) -

Las centrales nucleares de Vandellós II y Ascó I, ambas en la provincia de Tarragona, son las únicas de España que registraron notificaciones destacables en el segundo trimestre del año, de acuerdo con el nuevo sistema de supervisión que aplica el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) desde este año. Por ello, se llevarán a cabo medidas correctoras supervisadas por el Consejo.

Los resultados del segundo trimestre se hicieron públicos hoy en una rueda de prensa en Tarragona. Las dos centrales catalanas son las únicas que acumularon incidentes remarcables aunque no supusieron riesgo, mientras que los de las plantas del resto del Estado se catalogaron como "de muy baja importancia para la seguridad".

El nuevo sistema supervisor, llamado SISC (Sistema Integrado de Supervisión de Centrales Nucleares), establece varios niveles de actuación. De mejor a peor comportamiento éstos son Respuesta titular, Respuesta reguladora, Pilar degradado; Degradaciones múltiples y Funcionamiento inaceptable.

Ascó I registró el nivel de Pilar degradado por la fuga en el sistema refrigerador que registró el 21 de abril debido al fallo de una válvula de cierre. En octubre se realizará una parada programada y se aprovechará para averiguar el porqué de este fallo.

De todas formas, el portavoz de la Asociación Nuclear Ascó-Vandellós, Eugeni Vives, remarcó que este suceso "fue calificado como de nivel 0" en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES), es decir que no supuso riesgo para los trabajadores, la población y el medio ambiente. Precisamente, Vives destacó que la central de Ascó llevaba 476 días sin ninguna parada ni incidencia.

Por su parte, Vandellós II, se encuentra en la segunda columna del nivel de actuación debido a problemas registrados en el funcionamiento de los sistemas de mitigación de generadores diesel y por las paradas instantáneas no programadas. Así, dentro de uno o dos meses se realizará una inspección en Vandellós II para verificar el buen funcionamiento.

A pesar de estos indicadores, y de que entre marzo y junio se produjeron 32 hallazgos de inspección, es decir incumplimientos, en el conjunto de las instalaciones españolas, desde el CSN se afirma que "no significa que sean situaciones inaceptables, ya que si no se pararía la planta", según explicó el coordinador de la Inspección Residente de la Dirección Técnica de Seguridad Nuclear, Ramón de la Vega.

INDICADORES DE COLORES.

De hecho, en este nuevo sistema de supervisión, de origen americano, se cuentan como incidencias elementos que no suponen riesgo, como los accidentes laborales. El SISC es un sistema metodológico basado en medidas objetivas de valoración y respuesta que sirve para evaluar, mediante la adopción de indicadores, el funcionamiento de las centrales y observar si acumulan incidencias para determinar las actuaciones a realizar.

Los indicadores son el "verde" que indica funcionamiento dentro del rango de lo esperado; el "blanco" que, indica que aunque está fuera del rango, se cumplen los objetivos; el "amarillo", supone una pequeña reducción del margen de seguridad; y "rojo", una significativa reducción y que puede conllevar el cierre de la planta.

La información la proporcionan trimestralmente las centrales, de forma automática, sobre 16 indicadores de funcionamiento, repartidos en siete pilares en los que se describen las tres áreas estratégicas: seguridad nuclear, protección radiológica y protección física. La información que registra la central, la envía al Consejo para que la evalúe y decida la actuación. También se consigue información en las inspecciones que se realizan.

Según el consejero Juli Barceló, el SISC supone "más transparencia" sobre la situación de cada planta. Así, lo "preocupante" sería la acumulación de incidencias remarcables porque "del resultado de un trimestre no se puede deducir la seguridad de una central".

Según Barceló, el nuevo sistema es una "herramienta de coherencia reguladora" y no supone ninguna modificación en la manera actual de notificar la información, aunque ahora se calculan los indicadores con la finalidad de asegurar el funcionamiento seguro y sin problemas de las centrales. Así, se trata de un sistema que permite ver la evolución de las incidencias.

En este trimestre, la central de Vandellós II acumuló once sucesos no programados; Ascó I, diez; y la que registró más incidencias fue Ascó II con 19.

Este nuevo sistema de evaluación se utiliza únicamente en Estados Unidos y España, aunque hay países como Finlandia y Suiza que lo estudian.

Contenido patrocinado