Pimec y Fepime ven positivas las medidas de apoyo a las pymes del Gobierno pero lamentan que llegan tarde

Europa Press Catalunya
Actualizado: miércoles, 1 diciembre 2010 18:39

BARCELONA 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las patronales catalanas de la pequeña y mediana empresa Pimec y Fepime consideran que las medidas anunciadas este miércoles por el Gobierno van "bien encaminadas", aunque lamentan que llegan tarde y que profundizan poco en algunos aspectos.

En un comunicado, Pimec ha aplaudido que el límite para que las empresas puedan tributar a un tipo reducido del 25% en el Impuesto de Sociedades sea de 300.000 euros en vez de los 120.000 actuales, pero ha propuesto que los empresarios individuales y las microempresas tributen a un tipo fijo del 20%.

Asimismo, la patronal considera una buena medida la ampliación del concepto de 'empresa de reducida dimensión' hasta los 10 millones de euros de facturación, ya que se iguala con el límite de la Unión Europea. Pimec también ha pedido que, para llegar a tener un volumen de facturación inferior a los 10 millones, no computen de forma conjunta diferentes empresas de una misma unidad familiar.

Pimec también considera positiva la libertad de amortización del Impuesto de Sociedades hasta 2015 y la reducción de plazos y costes en la creación de empresas, ya que ha insistido en que se deben llevar a cabo medidas para incentivar a los nuevos emprendedores. Sin embargo, a pesar de valorar positivamente estas medidas, la patronal considera que "se deberían haber tomado antes".

Fepime también ha afirmado que las medidas "son acertadas pero llegan tarde". A parte de las medidas fiscales. La patronal también ha valorado positivamente la posible gestión privada del aeropuerto de El Prat, argumentando que es "un primer paso en la buena dirección para conseguir una autonomía total y más próxima y sensible al territorio".

Por contra, Fepime ha considerado que los 1.500 nuevos orientadores laborales que el Gobierno ha anunciado que destinará a encontrar trabajo a los parados deberían provenir de la propia plantilla de la Administración, y que en ningún caso debería suponer el incremento de funcionarios.

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