BARCELONA, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Interior, Felip Puig, ha explicado que mejorará los operativos de seguridad, aunque ha advertido de que "no se puede poner un policía en cada esquina", tras la muerte de un vigilante la mañana de este viernes en la estación de tren de Castelldefels.
Puig ha hecho estas declaraciones tras la firma de un convenio para la adhesión del municipio del Vendrell en el programario Sipcat, y ha asegurado que está prevista una reunión de coordinación con los representantes de la Dirección General de Transportes y Movilidad de la Generalitat.
Ha sostenido que "ningún acto delictivo quedará sin respuesta", a la vez que ha recordado que el presunto agresor ha sido detenido.
El conseller ha lamentado la muerte del agente de seguridad y ha destacado la profesionalidad del vigilante, que "ha muerto a golpes mientras hacía su trabajo".
Puig también ha señalado que a primera hora de la mañana de este viernes se ha puesto en contacto con el alcalde de Castelldefels y los responsables de Renfe para garantizar la el normal funcionamiento de la red.
Andalucía
