BARCELONA, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Gobernación y Administraciones Públicas, Joan Puigcercós, pretende que el Govern apruebe el proyecto de ley de ordenación territorial en este mandato, para que en esta misma legislatura llegue al Parlament y empiece a tramitarse, pero advirtió de que, desde entonces, dependerá ya del consenso entre los grupos.
Puigcercós afirmó también que quiere llevar al Parlament antes de fin de año el proyecto de ley de Oficina Antifraude de Catalunya, cuyo texto de la pasada legislatura se está "adecuando" ahora a las recomendaciones que hizo el Consell Consultiu de la Generalitat. "No son el Catecismo, pero deben tenerse en cuenta", avisó. En cualquier caso, auguró consenso político.
En una entrevista de Europa Press, el conseller republicano admitió que "será difícil" para su departamento completar los pasos previos del proyecto de ordenación territorial. Explicó que ya se ha empezado a hacer "la 'hoja de ruta' legislativa", para comprobar qué leyes estatales deberían reformarse para posibilitar la futura norma.
Entre los asuntos que deben confrontarse con la legislación estatal, destacó que se estudia cómo dotar de recursos a las veguerías; para ello, consideró posible que baste con que la futura ley catalana de finanzas sirva para que la Generalitat determine que los recursos destinados ahora a las actuales diputaciones pasen a las veguerias.
También se está estudiando si el modelo electoral de la vegueria precisa pasar por la legislación española; y analizar la compatibilidad de las veguerias con los límites provinciales.
Después, se deberá "definir muy bien" la transición de diputaciones a veguerias, las cuales no deben hacerse "manteniendo a la vez toda la estructura" de las diputaciones, según Puigcercós, porque sería una "sobreposición de aún más niveles administrativos" en vez de simplificar.
VEGUERIAS: PUEDEN GANAR COMPETENCIAS.
El conseller defendió que las veguerias deben tener "el mismo personal y los mismos recursos" que las diputaciones. Además, cree que las veguerías tengan tantas o más competencias que las actuales corporaciones provinciales, como "algunas cosas que ahora la Generalitat en el territorio".
Puigcercós cree que las veguerias deben tomar decisiones en materia sociosanitaria y escolar. "En estos ámbitos, cuanto más cerca esté de la gente la decisión, mejor para la gente".
Así, por ejemplo, apostó por que los Servicios Territoriales de la Generalitat sobre educación, que ahora están estructurados a nivel provincial, "se acerquen a la gente" a través de esta delegación de funciones del Govern. "Si la vegueria es una descentralización, debe fortalecerse", añadió.
Puigcercós también dijo que debe haber un representante de la Generalitat en cada vegueria --como ahora hay delegados territoriales--, pero "redefiniendo las funciones".
SIGUEN LAS 4 DEMARCACIONES ELECTORALES.
Puigcercós es optimista sobre el consenso de toda esta operación. Aseguró a las diputaciones que el proceso se hará con "toda tranquilidad y cautela" y que recibirán información "de todo" lo que se haga. Sí seguirán existiendo las comarcas y los consejos comarcales, cuya función debe ser siempre "mancomunar servicios".
En cuanto a la opinión del Estado, aseguró que esta administración "se ha relajado mucho" cuando se le ha dicho que todo esto "no debe ser un problema para que haya cuatro demarcaciones electorales españolas" -las cuatro provinciales-- conviviendo con las veguerias.
"El Estado se puede organizar como quiera", dijo, y añadió que ha asegurado al ministro de Administraciones Públicas que "no se actuará a sus espaldas" con esta ley. Deberá negociarse con el Estado, por ejemplo, una actualización de las partidas judiciales.
ANTIFRAUDE: SIN GRANDES CAMBIOS.
Sobre el proyecto de ley de Oficina Antifraude, el conseller dijo que la conselleria revisará el trabajo que están haciendo juristas para adecuar el proyecto a las recomendaciones del Consell Consultiu.
Puigcercós no prevé cambios sustanciales respecto al primer proyecto, y cree que el trabajo que hizo el Consultiu habrá servido precisamente para "eliminar los puntos más conflictivos".
Por eso, auguró consenso parlamentario para su aprobación, y alegó que "nadie puede estar en contra de pautas de buenas prácticas de transparencia". "Algunas autonomías están mirando esta ley" catalana, destacó al recordar que es una idea pionera en España.
LEY ELECTORAL: EL PARLAMENT DECIDE.
El conseller republicano también aludió a la futura ley electoral, para afirmar que "los diputados decidirán" si debe aprobarse en esta legislatura, aunque constató que los dos tercios del Parlament necesarios para su aprobación obligan a un gran consenso.
Reafirmó que el texto no es cosa de un gobierno, sino de un parlamento, y explicó que antes de verano estará listo el documento base de la comisión de una decena de expertos académicos a quienes ha encargado un documento que sirva de base a la ponencia parlamentaria que se cree. Faltan dos expertos por confirmar.
LOS MÍNIMOS DE LA NORMA.
Según Puigcercós, el documento no parte de ninguna premisa de su departamento ni incluirá los mínimos de la ley, sino que sólo pretende ser un punto de partida.
Aun así, el conseller espera que la ley deje "claros" los criterios de "proporcionalidad, ponderación territorial y paridad de los electos", y un modelo "que acerque el diputado al territorio".