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BARCELONA, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -
La portavoz de la comisión de Enseñanza de ERC y vicepresidenta del Parlament, Anna Simó, ha revelado que retirar los conciertos a la quincena de escuelas de élite catalanas que segregan por sexo ahorraría 22 millones de euros.
En una entrevista de Europa Press, Simó ha explicado que ésta es una de las propuestas que han trasladado a la Conselleria de Enseñanza de la Generalitat en el grupo de trabajo de enseñanza que mantienen, fruto del pacto con CiU: "Para nosotros los conciertos con las escuelas de élite no se tendrían que renovar el próximo curso".
Con esta medida, el ahorro de estos conciertos podría destinarse a otras "políticas prioritarias" para los republicanos, como avanzar las sustituciones de docentes, aumentar las becas de escolarización y poner al día los pagos, pese a los problemas de tesorería.
Sin embargo, ha propuesto mantener las ayudas al resto de centros concertados, porque considera que han hecho los deberes y realizan una función prioritaria de "inclusión social".
"Se deben redistribuir los recursos según el cumplimiento de los objetivos del servicio público educativo", ha insistido, y ha opinado que estos centros deben tener una financiación extraordinaria suficiente y sostenible, a diferencia de aquellos en que niños y niñas estudian separadamente.
Ha reconocido que el posicionamiento sobre las escuelas de élite es "uno de los puntos de más desacuerdo con el departamento" y que no resulta nada fácil --la eliminación de las escuelas de élite es una reivindicación de Esquerra desde el primer Govern tripartito--.
GRUPO DE TRABAJO
Según ha explicado, en el grupo de trabajo que tienen también estudian mejorar las sustituciones del profesorado, si bien Simó ha reconocido que, pese a los avances, no están "satisfechos".
El decreto de racionalización del gasto educativo del Gobierno central fijó en 10 días las sustituciones, aunque la Generalitat se comprometió a sustituir a los profesores de Infantil el primer día de la baja, a los seis días a los tutores de Primaria y Educación Especial, y sustituir inmediatamente la segunda baja simultánea en Secundaria.
Otra de las cuestiones que ERC ha puesto sobre la mesa es incrementar la partida de becas comedor porque las familias no se pueden permitir la parte no becada del menú escolar, y repensar los criterios de adjudicación para que, en función del informe de servicios sociales y de criterios de renta y necesidad, la beca pueda cubrir el 50% ó el 100% del coste.
También trabajan en homogeneizar los criterios que tienen los diferentes consejos comarcales para quitar la presión sobre las rentas medias y bajas: "Aquí hay una predisposición positiva por parte de los representantes de las asociaciones municipalistas".
En relación al mantenimiento de la universalidad de la beca, Simó se ha mostrado partidaria de "priorizar el nivel de renta como uno de los principales", sin caer en el asistencialismo, en el que los servicios públicos sólo son para las personas con extremas necesidades.
Ha recordado que ERC ha defendido siempre la universalidad como buena por ser más equitativa, ya que así las rentas medias tienen más alicientes para consumir y tener criaturas con ayudas que valgan la pena.
