Save the Children propone unir en un espacio la atención a niños víctimas de abusos sexuales

La responsable de Save The Children en Catalunya E.Rivas
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 4 diciembre 2018 11:47

En Catalunya 7 de cada 10 casos acaban sin sentencia por falta de pruebas contra el agresor

BARCELONA, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

Save the Children ha propuesto crear en Catalunya la Casa de los Niños, un modelo islandés que agrupa en un mismo espacio todos los recursos que intervienen en un caso de abuso sexual contra niños: policía, salud, protección de la infancia, Interior y Justicia, "todos trabajan juntos para atender al niño bajo el mismo techo" y evitar revictimizarlo.

En rueda de prensa este martes, la coordinadora del estudio de viabilidad del modelo, Emilie Rivas, ha explicado: "Declara una sola vez, en un entorno agradable, mientras que en el sistema actual el niño tiene que repetir su historia traumática hasta ocho o diez veces a personas diferentes", lo que puede hacer que altere el relato o no quiera hablar más.

Han iniciado conversaciones con la Generalitat, en la que ven "predisposición", y el Ayuntamiento de Barcelona para implementar este modelo en Catalunya, donde calculan que harían falta cinco casas --dos en Barcelona y una en el resto de provincias-- pero proponen empezar con una como piloto.

Además de mejorar la recuperación del niño y su familia, el modelo que proponen es más ágil y efectivo desde el punto de vista del proceso judicial, y cuida el testimonio, "la única prueba que hay contra el agresor", y proponen tomar el ejemplo de Islandia y Suecia.

ECONÓMICAMENTE VIABLE

"Es un modelo económicamente viable, porque no se trata de una gran inversión de dinero sino de una reordenación de recursos", ya que actualmente hay unidades que hacen los diferentes pasos, pero están separadas y no trabajan juntos, mientras que también ahorra tiempo y duplicaciones, como las que ocurren con las declaraciones actualmente.

"En Catalunya, siete de cada diez casos por motivo de abusos sexual infantil acaban sin condena porque no tenemos suficientes pruebas, porque no se ha cuidado al niño ni a su testimonio y al final el juez no tiene suficientes pruebas", ha lamentado la también responsable de políticas de infancia de la entidad en Catalunya.

El año pasado se denunciaron 549 casos en Catalunya de abuso sexual infantil y la mitad de las víctimas de abusos sexual son menores de edad, "pero el sistema no está adaptado a ellos", ni los departamentos están comunicados entre ellos, y, además, a pesar de que en cerca del 60% el agresor es alguien de su entorno, no se ofrece apoyo a las familias, para las que es un impacto también.

PROPUESTA A LA GENERALITAT

En enero empezaron a trabajar esta propuesta con la Conselleria de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, en la que ve que "hay predisposición", y ante el hecho de que la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGaia) está en un momento de saturación, han planteado la posibilidad de que sea otra Conselleria la que lidere el proyecto.

Se trata de un modelo que empezó en Islandia en 1998 y se extendió en Estados Unidos, desde donde la casa real sueca lo importó al país en 2005 y, desde entonces se ha extendido a muchos países de Europa -como Finlandia, Noruega, Inglaterra, Escocia, Polonia y Chipre, entre otros--.

El estudio de viabilidad, elaborado por la doctora en Psicología por la Universitat de Barcelona (UB) Noemí Pereda, se ha basado en cómo funciona este modelo en Suecia e Islandia y cómo podía aplicarse en Catalunya, donde puede irse adaptando a través de la experiencia.

Rivas ha destacado que esta protección en un solo espacio es una obligación legal, como figura en la Ley de infancia, y ha lamentado que en Catalunya, un niño que no tiene protección de la Dgaia, "no tiene acceso a un programa público, universal y gratuito, deberá ser derivado a una fundación privada", ante lo que llaman a crear estos recursos.

Ha alertado de que en Catalunya se denuncian pocos casos, y calculan que solo es el 15%: "El proceso es muy complicado, la gente no tiene confianza en el proceso judicial y hay miedo", a lo que se añade que son hechos escondidos, que ocurren en la intimidad, y siempre será la palabra del agredido contra el agresor.

En Europa existe desde hace 20 años, y además de atender a los niños, estas casas se vuelven centros de referencia que generan conocimiento: "Está demostrado en Islandia que desde que se implementaron se han triplicado las sentencias favorables a niños", se ha mejorado el proceso judicial, la recuperación de la víctima y la de su familia, a la que se enseña acompañarlo.