BARCELONA, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los escritores Ramon Solsona, Núria Amat y Cristian Segura han iniciado la Diada de Sant Jordi con un desayuno en Barcelona donde han coincidido en señalar que tienen buenas expectativas para el día del libro debido, en parte, al respaldo de los premios que les han sido otorgados este año.
Solsona, galardonado con el Premi Sant Jordi por su novela 'L'home de la maleta' (Proa), ha asegurado que afronta este día con actitud de trabajo y que no siente presión por las listas de ventas: "Los ránkings son cosas ajenas a los escritores".
Además, ha afirmado que éste es uno de sus días preferidos del año y que le gustaría "que todo el año fuera Sant Jordi", no solo por el ambiente que se vive en la calle, sino también por la gran cantidad de ventas de libros y de promoción de la lectura que se hace.
Con actitud sonriente y relajada, ha explicado que la relación con los lectores es otra de las grandes ventajas de la Diada, porque es el momento de la "recepción del libro", cuando sus seguidores le comentan sus opiniones sobre la infancia, la juventud y las difíciles relaciones familiares, temas centrales de su libro.
Amat, que este año presenta 'Amor i guerra' (Planeta), Premi Ramon Lull, se ha mostrado ilusionada con este día, que es su preferido de todo el año por ser una "fiesta de la literatura, del país y del pueblo".
Ha recordado que otras ciudades han intentado copiar el día de Sant Jordi pero no han tenido tanto éxito porque, en Catalunya, el día del libro conjuga muchas cosas: sentimiento, tradición, cultura, las rosas y el amor.
Sobre su novela, ha explicado que ya ha tenido contacto con los lectores --aunque ha reconocido que Sant Jordi es una oportunidad única para recibir comentarios y apreciaciones-- y que todos la han felicitado, especialmente por su capacidad de hablar de un momento complicado de la historia, como es la Guerra Civil, sin tomar partido, con objetividad y "voluntad de reflejar la realidad de la Barcelona de ese tiempo".
PREMI JOSEP PLA
El caso de Segura, ganador del Premi Josep Pla con 'El cau del conill' (Destino), es ligeramente diferente, ya que ha vivido los últimos ocho años fuera de Catalunya --en Alemania y China-- por lo que hacía tiempo que no pasaba la Diada en Barcelona.
Además, 'El cau del conill' es su primera novela, por lo que nunca había vivido este día como escritor, aunque ha asegurado que no está nervioso porque, aunque el libro se está vendiendo muy bien, no tiene la misma repercusión que otros autores famosos y mediáticos.
"La reacción que he tenido de la gente es muy positiva porque todo el mundo insiste en la verosimilitud del retrato que hago de la sociedad burguesa y 'pija' de Barcelona", ha asegurado.
También ha dicho que este es un día importante para la literatura catalana que encuentra, en Sant Jordi, un buen escaparate y una buena oportunidad para ampliar su cuota de mercado y repercusión cultural.
