Varios artistas participan en un concierto en el Liceu para sensibilizar sobre los problemas de salud de los músicos

Actualizado: miércoles, 24 enero 2007 18:40

BARCELONA, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

Distintos artistas de la talla de Amaral, Pepe Habichuela, Josemi Carmona y Miguel Gil, entre otros, participarán el próximo domingo 28 de enero en un concierto benéfico en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona para sensibilizar a la sociedad de los problemas de salud de los músicos derivados de su actividad.

Este concierto se enmarca en el festival Barnasants y es una iniciativa de la Fundació Ciència i Art que trabaja para sensibilizar y divulgar a la sociedad de estas enfermedades de los músicos, estudiar e investigarlas y formar a médicos en la materia.

El presidente de la Fundació Ciència i Art y traumatólogo, Jaume Rosset, señaló que un "75% de los artistas" padecen este tipo de enfermedades. Asimismo, remarcó que los músicos "tienen mucho más cuidado de su instrumento musical que de su propio cuerpo".

En este sentido, explicó que en las enfermedades que padecen los músicos intervienen factores postulares, técnicos, instrumentales o psicológicos que si no se "tiene un conocimiento amplio de una de las disciplinas artísticas difícilmente se podrá entender la causa y resolver el problema".

Algunas de estas enfermedades sólo las padecen este colectivo y los médicos y terapeutas que no se dedican a este tipo de medicina "desconocen cómo tratarlos".

Por ello, desde su fundación quieren conseguir que "el médico de cabecera pueda solucionar el problema y también haya unos médicos especializados para los problemas más graves".

Distintos artistas han padecido este tipo de enfermedades. Sin embargo, todavía es "un tabú" entre los músicos, aseguraba Rosset. Algunos de ellos son Louis Armstrong que sufrió una rotura del músculo orbicular del labio o Gary Graffman que tuvo disfonía focal, una enfermedad con la que no se controla el movimiento que quiere hacerse.

Los artistas no cobran por participar en este concierto y el Liceu ha cedido sus instalaciones. Sin embargo, siempre existen "unos gastos mínimos" por lo que "si tenemos un coste cero y se sensibiliza a la sociedad estaremos suficientemente satisfechos", señaló Rosset.