Duran resalta la vocación "hispana, mediterránea y europea" de Catalunya y dice que persistirá tras la crisis política
BARCELONA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
La décimoprimera Semana Mediterránea de Líderes Económicos (MedaWeek), que se celebra entre este miércoles y el viernes en la Casa Llotja de Mar de Barcelona, se centrará este año en aprovechar la diversidad de los países de las dos orillas del Mediterráneo "como gran impulso para el crecimiento" económico.
Así lo ha dicho el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, en la inauguración del evento, organizado junto con la Asociación de Cámaras del Mediterráneo (Ascame), la Unión por el Mediterráneo (UpM) y el Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed), y que reunirá en sus tres días de duración a más de mil empresarios.
El coordinador general de la MedaWeek, Anwar Zibaoui, ha detallado que se realizarán más de 60 sesiones de trabajo y que participarán 200 ponentes, además de 500 representantes de organismos que celebrarán sus asambleas y congresos en Barcelona aprovechando la MedaWeek, representando en total a 36 países de la región del Mediterráneo, lo que ha asegurado que demuestra que se trata de la cita anual "de mayor afluencia e influencia" tanto de Europa como del Sur del Mediterráneo.
Zibaoui ha destacado que Barcelona ocupa una posición estratégica en el Mediterráneo y supone una referencia de intercambios, diálogo e integración, a lo que ha añadido: "Sabemos que vive un momento de incertidumbre, pero mantenemos nuestra apuesta y confiamos en el futuro de Barcelona como centro decisivo".
"TRIPLE VOCACIÓN" DE CATALUNYA
El presidente del Consejo Asesor de la MedaWeek, Josep Antoni Duran, también se ha referido al conflicto político catalán, destacando la "triple vocación" de Catalunya: hispana, mediterránea y europea.
"Es verdad que hemos tenido y tenemos algunos problemas políticos debido a criterios distintos sobre la vocación hispana, pero los problemas políticos pasarán y la triple vocación de Catalunya persistirá", ha sostenido el exlíder de Unió, que ha afirmado que todas las crisis representan una oportunidad y que la que vive Catalunya no es distinta en este sentido.
Duran ha lamentado que la Unión Europea no ha dedicado los esfuerzos y recursos suficientes para fomentar el desarrollo de la orilla sur del Mediterráneo, y ha considerado que hay que mejorar y aumentar la cooperación, sobre todo en el comercio y la economía, argumentando que "la mejor arma contra el extremismo y el yihadismo es la cooperación entre el norte y el sur".
El presidente de la Cámara de Barcelona, Miquel Valls, también ha considerado que el papel de la UE en el Mediterráneo "debe ser objeto de cambio" y hay que retomar los objetivos del denominado 'Proceso de Barcelona' de 1995, con el objetivo de que el mar común no sea una brecha entre dos mundos distintos.
En la apertura de la MedaWeek también han participado el presidente del IEMed, Senén Florensa; el presidente de la Cámara de España, Josep Lluís Bonet; el secretario general de la Federación Mundial de Cónsules, Nikolaos Margaropoulos; el miembro del Secretariado de la Unión por el Mediterráneo Saïd Bhira, y el nuevo presidente de la Asociación de Cámaras de Comercio del Mediterráneo (Ascame), Ahmed M. El Wakil.
Bonet ha señalado entre los principales desafíos de la región del Mediterráneo la inmigración ilegal, los extremismos, el terrorismo, el desempleo juvenil y la falta de confianza en instituciones, y ha subrayado que hay que potenciar un trabajo conjunto para remar todos los países en la misma dirección.
Ha afirmado que la cooperación interregional es una de las vías que hay que impulsar, y ha asegurado que desde las cámaras de comercio españolas se esforzarán en intensificar las relaciones entre las dos orillas del Mediterráneo para aprovechar las oportunidades "que aún permanecen en buena medida ocultas".
El presidente de IEMed, Senén Florensa, ha sostenido que la diversidad de las dos orillas supone la fuerza para el crecimiento, ya que el sur necesita, por ejemplo, inversiones, capital y turistas, algo que puede proporcionar el norte, mientras que el sur puede aportar, por ejemplo, energía y jóvenes dispuestos a trabajar, con lo que ha concluido que hay que potenciar la "complementariedad" entre el norte y el sur del Mediterráneo.
