Actualizado: sábado, 15 octubre 2016 18:19

   MADRID, 15 Oct. (CHANCE) -

Verónica Romero fue una de las concursantes más queridas por la fiel audiencia de Operación Triunfo, que la salvaron en dos ocasiones, la primera frente a Juan Camus con más de un 70% de respaldo del público, lo que la llevó a colarse en el selecto grupo de los seis finalistas.

Además, su versión de One Day I'll Fly Away en la final del concurso, emitida en febrero de 2002, están entre los minutos de oro de la historia de la televisión. Finalizado el concurso, la relación con sus compañeros de experiencia se enfrió, menos con Rosa. La cantante confesaba recientemente a una publicación que fue en aquel momento cuando se dio cuenta de que debía romper con el pasado y empezar una vida nueva, una constante que le ha acompañado hasta la actualidad.

Aquel mismo verano en el que todos vivían en una nube de éxito lanzó su primer trabajo en solitario, La fuerza del sol, tan solo superado por Álex Ubago y David Bisbal en la lista de discos más vendidos. Logró el Disco de Platino y se fue de gira con su compañero David Bustamante recorriéndose cada rincón de España. Un año más tarde y desligada de Vale Music, la alicantina trabajó en su segundo álbum, Lluvia, cuyo lanzamiento coincidió desgraciadamente con el fallecimiento de su padre. A pesar del duro golpe, Vero demostró su profesionalidad y siguió con la promoción haciendo de tripas corazón.

Poco más tarde llegó un viaje a Londres, que le permitió formarse no solo en el idioma, también tomó clases de guitarra, baile e interpretación, que le sirvieron para lanzarse a la gran pantalla de la mano de Miguel Martí -dirigió muchos de sus polémicos videoclips -en Fin de curso. Cumpliendo los consejos de su padre, la artista de 38 años dio los primeros pasos de su propia discográfica, VK Entertainment, con la que lanzó su cuarto trabajo, Serotonina, un trabajo que fue interrumpido por su participación en Supervivientes: Perdidos en el Caribe.

Sin embargo, el parón mereció la pena, no solo porque quedó segunda después de ser salvada hasta en tres ocasiones con un respaldo de la audiencia de un 90%; sino porque la popularidad que le proporcionó el reality fue la mejor plataforma para pocos meses después lanzar el disco y el single Conectado a mí, convertido en todo un fenómeno en descargas digitales.

Su idilio con Estados Unidos empezó con la grabación de Limited Edition en Miami, su disco más personal porque los diez temas fueron compuestos y escritos por ella misma. La crítica se prendó de la alicantina, al colarse en las predominadas de los Latin Grammy y los Grammy Awards. El mercado estadounidense le tendió una mano que no iba a rechazar y poco después se instaló en Los Ángeles, donde vive en la actualidad.

Desde la meca del entretenimiento compuso varios temas, Contigo o sin ti, Confession, Light Crusader y Tastes Like Chocolate, probablemente uno de sus singles más ambiciosos bajo la producción de los mismos ingenieros de sonido que han trabajado con Rihanna, Cher o Depeche Mode. La gira que inició en 2013 en España la continuó un año más tarde en varios locales de su nueva residencia. Su repertorio sumó nuevos singles, como Number, Take Me Home Tonight, Por ti esperaré, Lo mejor de mí y Tu sonrisa.

Explosiva, desinhibida, carismática, un torbellino de sensualidad, con un cuerpo que tonifica desde que era niña y descubrió la gimnasia deportiva. Presume de una anatomía de atlética y ha protagonizado varios desnudos en portadas nacionales, como Interviú, Mam y Primera línea, esta última producción junto a Torito días después de la grabación del documental, que veremos mañana domingo en las pantallas de La 1. Parejas haberlas haylas, como las meigas, aunque Vero, que antes de dedicarse a la música llevó un puesto hippie en su tierra, se ha cuidado mucho de que su privada se comente en las redacciones del corazón. Eso sí, no pudo evitar que Álex Casademunt se fuera de la lengua en el estreno de Hora Punta (La 1) de Javier Cárdenas y saltara la bomba de su rollete durante el concurso, que ha sido uno de los temas más comentados la pasada semana. Nadie podía imaginar que hubo algo entre ellos, si la Academia hubiera tenido el número de cámaras de Gran Hermano otro gallo les hubiera cantado.