Cinco formas de descomplicarte la vida con el vino

   MADRID, 25 Nov. (CHANCE) -

  El vino ha dejado de tener la exclusiva de la comida familiar de los domingos y no necesita celebraciones especiales ni ceremonias; ha dejado de ser el protagonista indiscutible de los planes formales para ser el de los improvisados.

  Si eres de aquellos a los que el afterwork se les va de las manos; si en tu cocina no hay copas Borgoña sino vasos de dibujitos infantiles que en algún momento tuvieron crema de cacao, o si el último constipado te ha dejado casi sin olfato, bienvenido al club, aquí se trata de celebrar la vida sin tecnicismos pero con mucho disfrute.

  Olvídate de sulfitos, de terroir y de Sauvignon Blanc, lo que te vamos a proponer es descomplicarte la vida en torno al vino. Date un sí y LANzate a disfrutar sin complejos de la mano de Bodegas Lan.

1. DALE UN 'TWIST', CON HIELO, UVAS HELADAS O EN FORMA DE CÓCTEL

  Dale un 'twist' a tu momento frente al vino. Más fresco, más ligero y con más sabor a terraceo... El vino con un par de cubitos grandes o servido en una copa helada hace que cada sorbo tenga actitud de verano. ¿Te niegas porque crees que diluir el vino con agua es echarlo a perder? En ese caso, opta por cubitos de hielo hechos con vino o uvas congeladas, que decoran y, a la vez, te permitirán terminar con un bocado.

  Si la opción 'on the rocks' se te queda corta, apuesta por sabores combinados en forma de cóctel. Para los amantes del vino blanco, el White Citrus Spritz combina vino con limón y menta y suma tónica. ¿Te tienta? El Red Berry Cooler tiene algo que recuerda a las coctelerías neoyorkinas. Frutos rojos, soda y un toque de sirope son los ingredientes del nuevo 'Manhattan'.

  Un tip: Elabora tu combinado con el LAN D-12 y todos te pedirán la receta.

2. VINO, PANTALLAS Y COMPAÑÍA: LA FÓRMULA PARA ACORTAR DISTANCIA

 A estas alturas del año las agendas se complican y entre cenas de empresa, compras o comidas familiares y de diferentes grupos de amigos, quedar o reunir a todos alrededor de una mesa no siempre es posible.

 Quizás estás de Erasmus en la ciudad más fría de Europa o hasta arriba de planes imposibles de compatibilizar. Te proponemos que te reinventes y te LANces aunque sea en la distancia. Puedes organizar una quedada virtual y hacer un amigo invisible de modo que cada uno piense en el vino que más le puede gustar a su 'regalado'. Quedar con una videollamada y brindar aunque sea a través de la pantalla te hará sentirte cerca de los tuyos ya que, por mucho que os separen kilómetros, el vino borrará la distancia.

3. DEJA EL VINO PARA EL POSTRE (O EL DESAYUNO TARDÍO)

  Todos sabemos que la carne roja "va" con tinto, y el pescado, con blanco, pero, ¿qué vino tomar con la hamburguesa del local de moda, con ese kebab que se toma a deshora o con una mousse de chocolate negro? La decisión es tuya, la propuesta, un LAN Reserva.

   ¿Y si sumas una copa de vino a tu primera comida del día? No te estamos animando a que sustituyas el café que te despierta por las mañanas por un tinto y lo del champagne diario de Audrey Hepburn en 'Desayuno con Diamantes' es impensable; pero, ¿qué hay de una copa de vino en un desayuno tardío con los amigos? No solo de huevos benedictine vive el 'bruncher'...

4. UN BRINDIS HELADO Y EN ALTURA

  Los que no sabemos de vinos sí sabemos que el vino tiene una capacidad de hacerte entrar en calor que no tienen la cerveza u otras bebidas, por eso vamos a contarte que mucha gente que practica senderismo y actividades de montaña aprovecha la recta final del año para hacer una escapada y hacer un brindis en la cumbre.

  La satisfacción de llegar a lo más alto de una montaña o al hito marcado en un frío día de invierno bien merece una recompensa. Nadie va a llevar en la mochila copas de cristal pues los vasos se improvisan y pueden ser desde un pocillo de aluminio hasta la taza del termo del café. Nuestro consejo, acompaña ese vino con unos frutos secos y dile "sí" al instante, a los amigos y al paisaje porque posiblemente no vas a encontrar bar con mejores vistas.

5. CATA A CIEGAS: DA RIENDA SUELTA A LO QUE TE SABE

 ¿Y si las catas de vino dejaran de lado los tecnicismos? La cata tradicional suele estar rodeada de términos complejos, matices y juicios que nos suele sonar refinados y viejunos. Para postureos, ya tienes tus 'stories'; si pretendes descomplicarte la vida, LANzate a una cata a ciegas en la que lo importante no sea descifrar si el aroma es afrutado o amaderado sino descubrir lo que el vino te hace sentir.

 Seguro que tienes una amiga a la que todo le sabe igual, pues sé cómo ella. Reúne a esos amigos y familiares que no tienen ni idea de vino pero que sabes que van a llenar la tarde de risas y anécdotas que recordaréis más de una vez.

 Lo que importa no es cuánto sabes sobre vino, sino cuánto lo disfrutas. El protagonista lo dejamos a tu elección, pero te recomendamos que le des un sí a taparte los ojos frente a vinos como el LAN Ecológico, LAN Verdejo y LAN Rosado.