MADRID, 27 Abr. (CHANCE) -
La Academia de Televisión y de las Ciencias y las Artes del Audiovisual, en colaboración con el Ministerio de Cultura, organizaba este jueves, 24 de abril, el desayuno profesional Influencers & Televisión, un encuentro que ha reunido a destacados creadores de contenido junto a profesionales del sector audiovisual para reflexionar sobre las sinergias y la evolución de la relación entre las redes sociales y la televisión.
Allí, Carles Tamayo atendió a los medios de comunicación y reflexionó sobre su trayectoria en el mundo digital y cómo su carrera ha ido evolucionando. "Yo empecé hace cinco años con la intención de entrar en los medios tradicionales porque no encontraba un hueco. Mi idea era empezar en Internet para luego pasar a la tele, pero en Youtube me sentí muy cómodo, tenía mucha libertad para hacer el contenido que yo quería, así que cuando los medios tradicionales me propusieron cosas, dije: 'No, no, yo me quedo aquí'", explicó.
Sin embargo, no fue hasta hace dos años cuando le propusieron algo que no pudo decir que no: "Hasta que hace dos años decidimos hacer algo más grande: el documental 'Cómo cazar un monstruo' con bambú producciones para Prime Video".
En ese aspecto, es consciente de que forma parte de la familia de influencers, pero "prefiero ser periodista o documentalista o yo qué sé... El concepto de influencer, si te soy sincero, no lo entiendo muy bien. Entiendo que es alguien que vive de crear contenido en redes, pero eso también lo hace alguien que trabaja en televisión".
Y es que, "a día de hoy, cualquier persona tiene una cuenta de Instagram, sube reels, stories aunque sea solo para su círculo íntimo" y eso "ya es crear contenido", lo que "me parece muy bonito porque la gente ya sabe contar historias con imágenes, cosa que hace 15 años no".