MADRID, 2 Nov. (CHANCE) -
La noticia del robo a Iker Casillas en su propia casa por la que fuera su asistenta del hogar ha desatado una gran alarma entre los rostros conocidos de nuestro país al cerciorarse de que no pueden fiarse ni de sus propios empleados.
Hace unos días, Jaime Astrain era preguntado por el robo y aseguraba que se trata de "un tema muy heavy, sobre todo cuando depositas la confianza en alguien" y desvelaba que "nosotros también tenemos en casa una persona que para nosotros ya es de la familia, que nos ayuda con nuestra hija, y hostia... que desde dentro de casa te puedan robar y te puedan quitar lo que más quieres o, bueno, tus pertenencias... es muy heavy".
Además, explicaba que "escuché el otro día un comentario del propio o el supuesto ladrón, como que le parecían mal las palabras de Iker y pensé '¿por qué no lo has visto conmigo?' porque yo no le digo ni bonico ni nada".
Jaime se mostraba de lo más sorprendido al ver la desfachatez con la que el presunto autor del robo hablaba sobre el jugador de fútbol: "La gente tiene unos... Muy grandes, entonces, es decir, voy a robar a tu casa y encima pretendes que yo te dé las gracias, te dé la enhorabuena y no me cague en tu prima".
Por último, se le preguntaba si esta noticia le ha hecho desconfiar de la persona que tienen contratada en casa y respondía que no porque "soy de la opinión de que, igual que en una relación si sale mal, no tienes que seguir, las siguientes relaciones no tienen que ir con ese miedo porque la persona que conozcas va a pagar por lo que ha hecho la otra persona".