MADRID 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
Detrás del angelical rostro de la Princesa Mabel podría haber una faceta inquietante que esconde más de un misterio. Ha salido a la luz un libro en el que desvela un pequeño detalle que no conocíamos de la Princesa Mabel, esposa de Friso de Holanda. Por lo visto, la princesa esconde un pasado que podría estar relacionado con el mundo del espionaje.
¿Quién habría supuesto que un miembro de la realeza podría haber trabajado en su juventud como espía? Al parecer, la Princesa Mabel, transmitió información "muy valiosa y de primera mano" a los servicios de inteligencia holandesa sobre los objetivos del Gobierno de Bosnia para negociar la Paz.
Esta información pertenece a las memorias de Frits Hoekstra, un antiguo agente secreto, cuyas palabras se han hecho eco en la versión digital del diario holandés 'De Telegraaf'. Según revela Hoekstra, la princesa colaboró en los años 90 en las negociaciones de paz para acabar con la guerra de Bosnia.
En esta época, el trabajo de Mabel Wisse Smit consistía en filtrar información y para obtenerla se relacionó sentimentalmente con el ministro bosnio de Asuntos Exteriores, Mohammed Sacirbey. El papel de la joven Mabel fue "muy valioso" para los servicios de inteligencia holandesa, puesto que pudo saber de primera mano las intenciones del Gobierno de Bosnia.
Acabado este período, Mabel Wisse se desvinculó de los servicios secretos. En 2004 se casó con Friso de Holanda, quien aún permanece ingresado en estado de coma desde el pasado 17 de febrero tras sufrir un accidente a causa de quedar sepultado por una avalancha en Austria.