MADRID, 1 Jun. (CHANCE) -
Desde su llegada a España hace poco más de 24 horas con su nieta Ana Sandra, Ana Obregón permanece recluida en su domicilio de La Moraleja. Descansando tras el largo viaje, recuperándose del jet lag tras dos meses y medio en Miami, y viendo cómo se adapta la pequeña a su nuevo hogar y su nuevo país, la bióloga disfruta de esta etapa tan especial con su bebé y arropada por toda su familia.
Minutos después de aterrizar en Madrid, la presentadora recibía la visita en su casa de sus hermanos Amalia, Celia y Javier García Obregón, y de parte de sus sobrinos, ansiosos por conocer a la pequeña. Después de las presentaciones y de maravillarse con lo bonita y buena que es Ana Sandra, todos retomaban sus compromisos profesionales, dejando a Ana y a su nieta descansar.
¿Cómo están siendo estas primeras horas de la actriz en España con la niña? Como ha explicado Javier este jueves a su salida de la urbanización en la que reside a pocos metros de su hermana, están "todos encantados" y Ana "dedicada solo a cuidar a la niña, naa más".
Explicando que esta mañana le ha sido imposible acercarse a verlas -"luego iré" ha afirmado- el empresario ha reconocido que no sabe cuando podremos ver de nuevo a la bióloga y tampoco tiene ni idea de si ha solucionado ya los trámites burocráticos para que Ana Sandra tenga la nacionalidad española.
Muy discreto, y a pesar de la buena relación que mantiene con Alessandro Lequio, Javier ha asegurado que no sabe si el italiano acudirá a conocer a su nieta pero lo importante es que tanto su hermana como la niña están "fenomenal".
Cargando el vídeo....