Crucero por el Nilo: La cultura y la magia del antiguo Egipto

Templo Ramses en Abu Simbel
RIEGER Bertrand/hemis.fr
Actualizado: lunes, 17 agosto 2009 13:29

Más de 2.000 años después de su desaparición, la civilización egipcia sigue captando la atención de historiadores y turistas. La espiritualidad de sus templos, los misterios de las pirámides y la riqueza cultural de sus ciudades hacen de Egipto un país de visita obligada. La mejor manera de descubrir sus secretos es realizar un crucero por el río Nilo, que nos llevará desde Luxor a Alejandría, pasando por Assuán, Gizeh y, por supuesto, El Cairo.

Luxor

Nuestra aventura comienza en esta ciudad de la orilla oeste del Nilo, en la que se encuentran el Valle de los Reyes y los Colosos de Memnon. El lugar más emblemático de Luxor es el templo del mismo nombre, construido por los faraones Amenhotep III y Ramses II. En esta localidad también se encuentra el templo de Karnak, considerado el más grande del mundo y que alberga monumentos de la época faraónica y grecorromana.

Esna

A 55 kilómetros al sur de Luxor se localiza Esna, conocida por su santuario dedicado al culto de Jnum, que comenzó a levantarse en el siglo XV a.C. Posteriormente, fue edificado el templo dedicado a la triada de Esna: Jnum, Anuket y su hija Seshat. Sólo se ha conservado completa la sala hipóstila, caracterizada por sus 24 columnas de más de trece metros de altura, con bellos bajorrelieves y capiteles compuestos.

Edfu

Tras pasar unas horas en Esna nos dirigimos a Edfu, donde se encuentra el templo ptolemaico dedicado a Horus, el mejor conservado de Egipto. Una calesa nos llevará a este lugar sagrado, cuyas dependencias anexas, como el lago sagrado, las cocinas, los almacenes, las oficinas y el lugar de los halcones fueron absorbidas por la ciudad.

Kom Ombo

Esta ciudad es popular por el templo de Kom Ombo, levantado en la orilla del río Nilo en honor a Sobeck, dios de la medicina, y Haroris, hijo de Isis y Osiris.

Assuán

Continuamos nuestro viaje hacia el sur en Assuán, donde se encuentra la Gran Presa, una de las más importantes del mundo. Construida entre 1960 y 1970, durante el mandato de Nasser, se erige como la gran obra faraónica del Egipto moderno. La ciudad también es célebre por el templo de Philae, construido a partir de la trigésima dinastía, cuyo santuario principal está consagrado a Isis y su hijo Harpócrates.

Abu Simbel

Otro de los templos más populares de Egipto son los de Ramsés II y los de la reina Nefertari, ubicados en la ciudad de Abu Simbel. Desde aquí, se puede realizar una excursión de varios días por el Lago Nasser. Los templos forman parte del Museo al Aire Libre de Nubia y Asuán, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979.

El Cairo

Desde el Aeropuerto Internacional de Assuán nos trasladamos a El Cairo, donde los amantes de la cultura podrán visitar el Instituto de Papiros y el Museo de Arte Faraónico, único en el mundo y que alberga la colección del tesoro del famoso faraón Tutankhamon. Un paseo nos conducirá a la ciudadela de Saladino, con su mezquita de alabastro, y al mercado oriental de Khan el Khalili, uno de los bazares más originales del mundo y que cuenta con siete siglos de historia. A través de las antiguas travesías e iglesias de la ciudad llegamos a Cairo Copto, la parte antigua de la ciudad.

Gizeh

A 20 kilómetros de El Cairo se encuentra la localidad de Gizeh, donde se erigen las Pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos, la única de las Siete Maravillas del Mundo antiguo que sigue en pie. Postrada junto al valle del Nilo, como guardiana de las pirámides, se encuentra la Esfinge, con cabeza humana (atribuida al rey Kefrén) y cuerpo de león. Quienes quieran aprovechar al máximo su estancia en Egipto, tienen la oportunidad de realizar una visita a Memphis, la primera capital de Egipto, y Sakkara, donde se encuentra la Pirámide Escalonada de Zoser, la más antigua de las pirámides conocidas.

Alejandría

Conocida como la "perla del Mediterráneo", Alejandría esconde importantes ruinas monumentales bajo sus aguas. De los antiguos monumentos se conservan en estos días la columna de Pompeyo, el Anfiteatro, las catacumbas de Kom el-Suggafs, el Palacio de Montazah y la Fortaleza de la Bahía Quait. Para bucear en la historia de la ciudad, nada mejor que visitar el Museo Grecorromano