MADRID, 10 Mar. (CHANCE) -
A pesar de que 'Supervivientes' acaba de empezar, cuatro días le han servido a Terelu Campos para abrirse en canal y sincerarse como nunca con sus compañeros sobre su enfermedad. Después de superar dos cánceres de pecho, la colaboradora ha confesado que "nunca me pregunté por qué me había tocado a mí, pero sí por qué me había salvado yo".
"Detesto la pena, no he venido aquí para dar pena a nadie, lo siento, pero no. Es algo que no me quiero permitir a mí misma. Ni soy ganadora, ni soy más luchadora que nadie, soy como tantas personas que nos están viendo, que no tienen más cojones que luchar, no les queda otra. Aquí haces lo que te dicen y punto, a partir de ahí, tener suerte, que lo que te haya pillado pueda curarse, no es más luchador el que lo vence que el que se va en el camino, es igual" ha expresado emocionada al ver el vídeo del relato sobre su enfermedad este domingo durante la primera gala de 'Supervivientes: Conexión Honduras', pidiendo perdón a su hija Alejandra Rubio porque le prometió que intentaría no llorar durante el reality.
Este lunes la novia de Carlo Costanzia ha cumplido con su cita semanal como colaboradora de 'Vamos a ver' y, como no podía ser de otro modo, ha desvelado cómo está viendo a su madre en el programa y qué le pareció que se sincerase como nunca sobre su enfermedad.
"Sabía que mi madre podía llorar, sabía que podía pasar. Me sorprendió que me pidiese perdón, me dio como pena. Yo simplemente le di el consejo de que sacara su lado divertido" ha afirmado, confesando que está viendo a su madre "muy bien" y "estoy muy sorprendida para bien, de verdad", de cómo se ha adaptado a las condiciones extremas de 'Supervivientes'. "Ella es muy recta, y cuando se abre es más sensible y yo también quería que se viese esa parte de ella" ha reconocido.
"Yo lo que le dije fue 'no quiero ver a la persona que has creado, no sé si por ponerse una coraza, durante estos años en los platos de televisión, esa imagen seria y recta, quiero ver a mi madre" ha desvelado, admitiendo que no le gusta ver a su madre pedirle perdón como hizo anoche tras sincerarse sobre su enfermedad: "Yo en ningún momento quiero que ella sienta que para mí es una decepción" ha expresado emocionada.
"Los que me conocéis un poco sabéis que soy rara con estas cosas. Hay cosas que me gustan en privado, que me guardo para mí; creo que es algo de lo que mi madre ya ha hablado y ha contado. En privado me parece fenomenal, pero hay cosas que no me gustan" ha confesado, dejando claro que Terelu y ella son "muy distintas y yo no le puedo pedir a mi madre que sea una persona que no es".
"A mí me da pudor que mi madre desnude su alma de esa manera y hay cosas que me gustaría que se quedaran en privado pero es su vida, y que ella las cuente me parece fenomenal. Estoy muy orgullosa de ella y no me tiene que pedir perdón por nada. Estoy orgullosa y ella lo sabe" ha concluido, mostrando su apoyo incondicional a la presentadora.