Concha Velasco: "Antes iba de Emma Thompson, ahora voy de Glenn Close"

Concha Velasco En Gran Hotel
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 25 octubre 2011 19:04

MADRID, 25 Oct. (Por Alba G.Salas) -

Incansable, maravillosa y siempre profesional. Da igual los años que pasen, Concha Velasco sigue radiante y llena de vitalidad. A sus 72 años, continúa trabajando sin parar, con gran profesionalidad y con la misma ilusión que hace 50 años.

Confiesa que hubo momentos personales que le hicieron tener amagos de jubilación, pero cómo ella misma se pregunta ¿dónde está mejor que trabajando? En la actualidad, podemos verla cada martes en 'Gran Hotel' y en el teatro con 'Concha, yo lo que quiero es bailar', un musical sobre su vida. Allí, nuestra Concha se convierte en la Tina Turner española para deleitarnos, años después, con la chica ye- ye.

- 'Cine de Barrio', 'Gran Hotel', ¿te queda tiempo para algo?

- Estoy encantada. Estoy en una de las mejores etapas de mi vida. También hago teatro, acabo de volver de Bilbao, de hacer el musical sobre mi vida. Tengo un papel en la mejor serie de televisión. Le acabo de decir a mi representante: Antes iba de Emma Thompson, ahora voy de Glenn Close. Claro, porque a mi lo que me gusta es hacer personajes.

- El musical sobre tu vida, ¡va viento en popa!

- Estrené en Valladolid, he estado dos semanas en Bilbao, ahora tengo tres días en Pamplona y seis meses en Barcelona. Lo compagino viniendo a grabar 'Gran Hotel'.

- ¿Cuál es la canción que define tu vida?

- Tengo dos. Una, la canté en 'Hello, Dolly' que es 'No voy a dejar el desfile pasar'. 'Nadie echará el telón de mis sueños, quién me busque no me va a encontrar'. Esa es una. La otra es 'Aquí estoy' y la letra dice, 'por muchas cosas que me pasen, yo sigo aquí'.

- ¿Qué queda de aquella chica ye- ye?

- Me acaba de dejar sin voz otra vez porque en el musical la canto y el público me la pide y yo me creo Tina Turner. El otro día, ya mis compañeros me decían que cortase, porque llevaba 15 minutos cantando la chica ye- ye con los espectadores. (Risas) Quedar no queda nada, soy ya muy mayor. Pero sí tengo la cabeza muy bien puesta y no digo esas tonterías de 'Uy, la chica ye- ye no, que yo soy una actriz muy importante'. ¡Viva la chica ye- ye!

- ¿Cómo lo haces, Concha?

- Con ilusión y con una salud de hierro. He pasado mis momentos de crisis personales que me hacían tener amagos de jubilación, y ahora he decidido que no, ¿dónde voy a estar mejor que trabajando? Además, que tengo la tremenda suerte de hacer proyectos estupendos. El único 'pero' es que no puedo ver a mi nieto, pero espero que en Barcelona me lo lleven más tiempo. Cuando estoy en Madrid, es sólo para grabar.

- ¿Por qué aceptaste tu papel en 'Gran Hotel'?

- Soy consciente de que a mi edad, voy a hacer 72 años en un mes, soy una actriz de mucho éxito, porque la inmodestia es una tontería y la falsa modestia dos, sé cual es mi sitio en el momento actual. Entonces, que me ofrezcan un personaje con tanta carne en una serie donde están los mejores actores jóvenes del momento, para mí es muy gratificante. Además, es un personaje estupendo que tendrá que luchar con la otra mala, Adriana Ozores. Aún así, ella es la mala, rica y dueña, y yo soy una mujer maltratada.

- Actores como Yon o Amaia, ¿te preguntan y te piden consejo?

- Me dicen cosas, sobre todo Yon. El otro día me pidió que le diera un consejo porque le impresionaba, al igual que a mí me impresionan los directores. A mí me temblaban las piernas. Pero le dije: ¡no! He aprendido de las grandes con las que he trabajado, que no se les puede dar consejos a un chico que empieza. Para eso están los productores y directores que les han contratado. Entonces, todas esas personas que tienen esa manía de aconsejar a los demás, deberían estar prohibidas. No tenemos por qué decirles a nuestros compañeros como lo tienen que hacer.