MADRID 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un estudio elaborado por astrónomos del Instituto de Tecnología de California (Caltech) ha revelado la existencia de una nube muy densa, situada en el centro de la Vía Láctea, que podría contener pistas sobre cómo nacen las estrellas.
Según han explicado los expertos, esta nube se sitúa en una zona en donde son habituales las nubes de gas y polvo, concretamente, cerca del agujero negro de la galaxia (tres veces más masivo que el Sol y cuya gravedad es lo suficientemente fuerte como para arrastrar estrellas que están azotando a su alrededor a miles de kilómetros por segundo). Sin embargo, esta nube, llamada G0.253 0.016, tiene unas características que los científicos han descrito como "peculiares" y que "desafían las reglas de formación de estrellas".
Gracias a las imágenes infrarrojas del centro de la galaxia, la nube - que está a 30 años luz de la Tierra- aparece como una silueta en forma de alubia contra un fondo brillante de polvo y gas que brilla intensamente en luz infrarroja. La oscuridad de la nube significa que es lo suficientemente densa como para bloquear la luz.
Según los estudios llevados a cabo hasta ahora, las nubes de gas crean bolsas de material denso que se colapsan, debido a su propia gravedad y, eventualmente, forman estrellas. Una de estas regiones gaseosas famosa por su prodigiosa formación estelar es la Nebulosa de Orión. Sin embargo, la nueva nube hallada es 25 veces más densa que Orión, pero solo unas pocas estrellas nacen allí y, además, son muy pequeñas.
De hecho, los astrónomos del Caltech han explicado que la tasa de formación estelar es 45 veces menor que lo que los astrónomos podrían esperar de una nube de esta densidad. "Es una nube muy densa y no forma ninguna estrella masiva, lo que es muy raro", ha apuntado uno de los autores del trabajo, Jens Kauffmann.
El investigador ha señalado que este estudio, publicado en 'Astrophysical Journal Letters', muestra que la formación estelar puede ser más compleja de lo que se pensaba y que la presencia de gas denso no implica automáticamente que la región produzca estrellas. A su juicio, investigaciones derivadas de este hallazgo pueden ayudar a los astrónomos a comprender mejor el proceso de formación estelar.
Por otra parte, el trabajo ha llevado a obtener otros datos, como que la nube está llena de monóxido de silicio (SiO), que sólo está presente en las nubes donde la transmisión de gas choca y rompe granos de polvo. Normalmente, las nubes solo contienen un "puñado" de este compuesto, pero la gran cantidad de SiO detectada en esta nube galáctica indica que puede estar formada por dos nubes que chocan y cuyo impacto envía ondas de choque a través de su centro.