El orbitador de Mercurio de la ESA supera su prueba final

   MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

   La nave Mercury Planetary Orbiter de la ESA, contribución europea a la misión Bepi Colombo a Mercurio, ha pasado su prueba final en la configuración de lanzamiento.

   Junto a la japonesa Mercury Magnetospheric Orbiter, será apilada en el Mercury Transport Module, para su lanzamiento el próximo año con destino al planeta más  interior del Sistema Solar.

   Durante el viaje, la misión utilizará una combinación de propulsión eléctrica y asistencias de gravedad múltiple en Tierra, Venus y Mercurio para completar el viaje de 7,2 años.

   Una vez en Mercurio, los orbitadores se separarán y se moverán en sus propias órbitas para realizar mediciones complementarias del interior, la superficie, la exosfera y la magnetosfera de Mercurio. La información nos dirá más sobre el origen y evolución de un planeta cercano a su estrella madre, proporcionando una mejor comprensión de la evolución general de nuestro propio Sistema Solar.

   Para prepararse para las duras condiciones cercanas al Sol, la nave espacial ha sido sometida a pruebas extensas tanto como unidades separadas como en la configuración de lanzamiento y crucero de 6 metros de altura.

   Un conjunto de pruebas realizadas a principios de este año en el centro técnico de la ESA en los Países Bajos se centró en el despliegue de los paneles solares y los mecanismos que bloquean cada panel en su lugar. La placa de 7,5 metros de largo del Mercury Planetary Orbiter y las dos de 12 metros del Mercury Transport Module se plegarán mientras estén dentro del cohete Ariane 5.

   El mes pasado, la pila completa de la nave espacial fue probada dentro de la cámara acústica, donde las paredes están equipadas con potentes altavoces que reproducen el ruido del lanzamiento.

   La semana pasada, las pruebas imitaron las intensas vibraciones experimentadas por un satélite durante el lanzamiento. La pila completa se sacudió a un rango de frecuencias, tanto en movimientos hacia arriba como de lado a lado.

   Estas fueron las pruebas finales que se completarán con BepiColombo en la configuración de lanzamiento mecánico, antes de volver a montarse en el sitio de lanzamiento.

   En las próximas semanas se desmontará el conjunto para preparar el módulo de transferencia para su última prueba en la cámara de vacío térmico. Esto comprobará que soportará los extremos de las temperaturas en el camino a Mercurio.

   La última "revisión de calificación y aceptación" de la misión está prevista para principios de marzo. Luego BepiColombo será llevado al puerto espacial de Europa en Kourou, Guayana Francesa, en preparación para la ventana de salida de octubre de 2018. La fecha se confirmará a finales de este año.

   "Esta semana fue la última oportunidad para ver la nave espacial en su configuración de lanzamiento apilada antes de que salga de Europa. La próxima vez será cuando estamos en el sitio de lanzamiento ya alimentado", dice en un comunicado Ulrich Reininghaus, Gerente de Proyecto BepiColombo de la ESA. "Esto es todo un hito para el equipo del proyecto. Esperamos poder completar las pruebas finales de este año y enviarlas a Kourou según lo previsto".