La diversidad de los microorganismos del ártico es única

Actualizado: lunes, 8 octubre 2012 19:35

MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un estudio internacional, que ha contado con la participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha determinado que la diversidad de microorganismos en el Ártico es única, en comparación con el resto de océanos del planeta.

El equipo de investigadores, que incluye científicos de Francia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Canadá, Suecia y España, ha analizado 800.000 secuencias genéticas procedentes de 90 muestras de microorganismos. En concreto, el trabajo ha comparado 20 muestras del océano Antártico con 24 del Ártico recogidas en la superficie y en las profundidades.

Además, han incluido 48 muestras adicionales de latitudes más bajas para analizar la huella polar en la biogeografía bacteriana marina del océano global. De este modo, los científicos han comparado específicamente muestras de las regiones costeras y de mar abierto, así como muestras recogidas en invierno y en verano.

Los resultados del estudio, publicados en 'PNAS', señalan que los microorganismos que viven en las profundidades de los océanos polares comparten el 40 por ciento de las similitudes taxonómicas, mientras que sólo el 25 por ciento de los grupos taxonómicos identificados en la superficie es común.

El investigador del CSIC en el Instituto de Ciencias del Mar, Carlos Pedrós-Alió, ha indicado que "las bacterias que forman el plancton de la superficie están sometidas a condiciones más variables que se desencadenan a corto plazo, mientras que las de las profundidades están estructuradas en función de la conectividad de la circulación oceánica".

APORTE DE AGUA DULCE

El experto ha indicado que las mayores diferencias tienen que ver con el aporte de agua dulce a estos ecosistemas. Aunque los polos reciben agua procedente del deshielo glacial, el agua dulce que recibe el Ártico llega, sobre todo, de las grandes cuencas continentales de los sistemas fluviales. A su juicio, esta circunstancia es, probablemente, la explicación para las grandes diferencias entre los polos observadas en los microorganismos que viven en las regiones costeras.

"Se han comparado las comunidades microbianas del Ártico y de la Antártida y se ha visto que son muy diferentes", ha señalado Pedrós-Alió, quien ha añadido que, "este resultado indica que las bacterias no tienen tanta capacidad para dispersarse con facilidad de una zona polar a otra como se suponía". "El aislamiento hace posible la especiación y, como consecuencia, la biogeografía", ha destacado.