Archivo - El módulo central de la estación espacial y el cohete portador de carga pesada Long March 5B encargado de lanzarlo, a su llegada al Centro de Lanzamiento Espacial Wenchang en la provincia de Hainan - CCTV - Archivo
MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
España dispondrá en 2023 de sensores espaciales más avanzados que permitirán duplicar el número de objetos detectados, al poderse observar objetos mayores de 50 centímetros a la distancia de 800 kilómetros. Y antes de 2030, la tecnología española podrá detectar objetos más pequeños, de diámetro superior a 15 centímetros, también en una órbita de 800 kilómetros.
Así consta en una respuesta por escrito del Gobierno a una pregunta registrada por el PP el pasado 7 de mayo sobre las medidas a adoptar por España para garantizar la seguridad de la población, después de que algunos medios apuntaran que un cohete chino (el Long March 5B), de 21 toneladas y lanzado el 29 de abril, podría colisionar en algún lugar de Madrid, incluso en zonas pobladas, el 8 de mayo.
Finalmente, este hecho no se ha producido. "Los restos del cohete chino cayeron el domingo 9 de mayo de 2021 en el Océano Índico, cerca de Maldivas", apunta el Gobierno en el escrito, añadiendo que "la mayoría de sus restos ya se habían desintegrado al entrar en la atmósfera".
En la respuesta, a la que ha tenido acceso Europa Press, el Ejecutivo asegura que el Servicio de Vigilancia y Seguimiento Espacial de la Unión Europea (EUSST), consorcio en el que participa el Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI), dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, había monitoreado el cohete y considerado "poco probable" que los restos del mismo cayeran en zonas pobladas de la Tierra.
Asimismo, indica que el CDTI (que es el coordinador del EUSST en lo relativo a vigilancia espacial), junto a sus socios europeos, estuvo monitorizando el proceso de entrada en la atmósfera en estrecha coordinación con sus homólogos estadounidenses, con los que se intercambió información de manera regular, lo que permitió verificar, en todo momento, la precisión de las medidas europeas sobre la trayectoria del cohete.
El CDTI presta junto a Francia el servicio de prevención de colisiones, que proporciona información puntual a los satélites europeos frente a amenazas de impacto de objetos espaciales que pudieran deteriorar su funcionamiento. Con las tecnologías ya disponibles, se detectan objetos de un diámetro superior a 90 centímetros, a una distancia de 800 kilómetros.
Tal y como apunta el escrito, actualmente, el proyecto europeo EUSST está proporcionando "excelentes resultados" con una dotación presupuestaria que el Gobierno considera "muy modesta", del orden de 225 millones de euros para el periodo 2021-2027. "Disponer de un sistema de vigilancia espacial comparable al de Estados Unidos requeriría una inversión de entre 5.000 y 10.000 millones de euros en dicho periodo", concluye.