los primeros británicos "eran caníbales"

Cueva
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Actualizado: viernes, 7 agosto 2009 16:23

MADRID, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -

Arqueólogos de la Universidad de Oxford (Inglaterra) afirman que los primeros pobladores británicos "podrían haber sido caníbales", basándose en las marcas de un hueso de más de 9.000 años de antigüedad perteneciente al Mesolítico, hallado a finales del siglo XIX en el condado de Devon y que, según dicen, "constituye una evidencia del desarrollo de complejos rituales de enterramiento y prácticas caníbales en aquel periodo".

Así, según recoge la BBC, los investigadores explican que la pieza tiene impresas las marcas de un corte realizado por una herramienta cortante de piedra y que éstas "son acordes a las que aparecen tras un acto de desmembramiento". "Se trata de una serie de finas señales paralelas como las que deja la desarticulación de un cuerpo o la acción de cortar un brazo humano", señaló el experto de la universidad Rick Schulting.

"La víctima ya estaba muerta cuando sufrió la mutilación, por lo que estamos hablando de un desembramiento que, por alguna extraña razón, fue realizado post-mortem", añadió Schulting, quien describió que los cortes "fueron descubiertos en la parte superior del cúbito, junto al codo". "Con toda probabilidad las heridas fueron causadas por un arma de piedra y no de metal", aclaró.

En este sentido, Schulting apuntó que dichas marcas podían ser consecuencia de un complicado rito mortuorio o de la ingesta de una persona "como parte de una práctica de canibalismo". Además, según los científicos, la fractura del hueso se produjo cuando éste "estaba todavía fresco", lo que refuerza la teoría de la antropofagia. No obstante, la comunidad de expertos demandó cautela ante tales afirmaciones.

El hueso fue hallado a finales del siglo XIX en los niveles superiores de las cuevas de Kent (Inglaterra) por el arqueólogo y geólogo William Pengelly y, posteriormente, fueron almacenadas en el museo de Torquay (Devon) hasta que el curandero Barry Chandler detectó las marcas. Tras mostrar su descubrimiento a los científicos, éstos determinaron que pertenecía a un humano adulto. "Es extremadamente raro descubrir restos humanos de esta época en Gran Bretaña", indicó el investigador.

EL CARBONO LO SITUÓ EN EL MESOLÍTICO

Más tarde, las pruebas del carbono ayudaron a situar el hueso en el periodo Mesolítico, entre el final de la última Era Glacial y el comienzo del desarrollo de la agricultura. Sin embargo, para el investigador, estos resultados eran "sorprendentes", ya que no imaginaba que fuesen tan antiguos. Así, en Reino Unido los últimos huesos hallados con marcas similares fueron encontrados en la cueva de Gough (Somerset) y se estima que tenían alrededor de 5.000 años.

En la actualidad Schulting espera resolver este misterio y arrojar luz al estudio de los primeros británicos, para lo que afirma que regresará a las cuevas de Kent con la esperanza de hallar nuevos huesos humanos o de animales de este mismo periodo y constatar si poseen las mismas marcas. Cree que, con ello, podrá determinar si fueron sometidos también a estos rituales y "conseguir dar consistencia a sus hipótesis".