Los refrigerantes químicos son "mucho más peligrosos" para el medio ambiente de que lo se creía

Actualizado: martes, 23 junio 2009 18:32

MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los gases refrigerantes químicos (gases-F), los que se utilizan para absorber el calor y mantener los ambientes fríos, son "mucho más peligrosos" para la conservación medioambiental de lo que los científicos creían hasta el momento, según concluye el último estudio de la Agencia de Evaluación Ambiental de Holanda, de que se desprende que estos gases "contribuyen a aumentar los efectos nocivos del cambio climático"

Así, este informe, publicado en el 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS) y facilitado por Greenpeace, refleja que las emisiones de hidrofluorocarbono (HFC's) crecerán rápidamente en los próximas décadas o años. Además, advierte de que este fenómeno pondrá en peligro la reducción efectiva de los gases del efecto invernadero, la eficiencia energética y el desarrollo de nuevas energías "más limpias y sostenibles".

En esta línea, la organización insta a la sociedad a que, del mismo modo en que están reduciendo las emisiones de dióxido de carbono (CO2) para impedir que la temperatura global aumente dos grados, haga lo mismo con estos gases, pues podría reducir en un 45 por ciento el efecto invernadero y paliar las consecuencias del calentamiento global.

Por otra parte, explica que los HFC's fueron creados para remplazar a los productos químicos dañinos con la capa de ozono, "sin tener en cuenta su alto nivel de peligrosidad". No obstante, ahora los científicos advierten de la necesidad de reducir sus emisiones "de forma considerable", antes de mediados de siglo, para estabilizar la atmósfera. Así, subrayan que "su utilización incontrolada alejará los retos fijados por los ecologistas".

"Debemos poner fin de forma agresiva las emisiones de HFC's para poder combatir eficazmente el cambio climático", destaca el director de Investigación de Greenpeace en EE.UU, Kert Davies. "Este informe confirma lo que desde la organización llevamos mucho tiempo advirtiendo", añade.

PROHIBICIONES NECESARIAS

Así, apunta que para reducir su uso, será necesario que se impongan prohibiciones en todo el mundo y ampliar dichos esfuerzos rápidamente en todos los países industrializados y en los que se encuentran en vías de desarrollo. En este sentido, destaca que estas medidas "deberán sobresalir del esfuerzo conjunto de lo estipulado por el Protocolo de Kioto y de lo que se concluya en diciembre en Copenhague".

Finalmente, Greenpeace explica que estos gases se utilizan principalmente en los equipos de refrigeración y en los sistemas de aire acondicionado que se instalan en las casas, los coches y otros medios de transporte. "La Administración Obama debería hacer todo lo que estuviese en su mano para frenar las emisiones de los gases refrigerantes, sin escatimar en esfuerzos para limpiar el sector energético", concluye Davies.