MADRID, 23 Ago. (EUROPA PRESS) - Concretamente, la presencia de parches en el cráneos, donde se había reducido el hueso, indican que estaba anémica y los investigadores dicen que esto podría haber sido causado por parásitos de la malaria, como el paludismo o la esquistosomiasis, una infección de gusano plano. Como su nombre real se perdió hace mucho tiempo, el equipo ha decidido llamarla 'Meritamón', que se traduce en 'amada del dios Amón'. "Antes se pensaba que la cabeza podía estar estropeada en el interior, de los vendajes y que su eliminación podría causar daños graves. Sin embargo, las tomografías computarizadas revelaron este no era el caso y el cráneo fue encontrado en extraordinarias buenas condiciones", apuntan los científicos. La autora principal del proyecto, Varsha Pilbrow, explica que la idea de llevar a cabo esta reconstrucción es "coger esta reliquia y, en cierto sentido, traerla de vuelta a la vida mediante el uso de toda la nueva tecnología". "De esta manera puede llegar a ser mucho más que un objeto fascinante para ser puesto en exhibición", ha añadido. Del mismo modo, el equipo está trabajando para determinar qué comía 'Meritamón' y donde vivió. Esto se investiga a través de los átomos de carbono y nitrógeno en el tejido y la datación por radiocarbono.