VALENCIA, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Delegación de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible ensaya la nutrición biológica para los diferentes jardines de la ciudad de Valencia. En este sentido, ha realizado unas pruebas experimentales de abonos biológicos en algunas plantas del Jardín del Turia, con el objetivo de determinar los beneficios de este tipo de abono, informaron fuentes municipales en un comunicado.
Las pruebas se han llevado a cabo en distintas praderas del Jardín del Turia, dentro de los campos de prácticas de la Fundación Municipal de la Escuela de Jardinería y Paisaje, donde se han aportado abonos biológicos. Estos abonos poseen determinados microorganismos que tienen la capacidad de aumentar el potencial bionutritivo de las plantas.
"El uso del abono biológico es muy beneficioso, tanto para el crecimiento de las plantas, como para mejorar el estado sanitario de las mismas, y si las pruebas son satisfactorias este método podrá utilizarse en todos los jardines de Valencia", aseguró el concejal delegado, Ramón Isidro Sanchis.
Además, los abonos "incrementan la absorción de nutrientes por parte de las plantas, que son aportados de forma natural en el mantenimiento ordinario de los jardines", añadió.
En la ciudad de Valencia y gracias a la utilización de maquinaria especial como son las segadoras recicladoras, al segar las praderas de césped se mantienen los restos triturados sobre la tierra, de forma que sus nutrientes pueden ser absorbidos de nuevo. "Estas máquinas incluso permiten depositar los restos de poda triturados sobre las zonas donde hay plantas arbustivas", explicó Sanchis.
En este sentido, apuntó que "el abono biológico ayuda a solubilizar mejor el fósforo que existe en el suelo, con lo cual se aprovecha más, y fija biológicamente el nitrógeno". De hecho, en general, el abono biológico "mejora los suelos y también reduce su salinidad y éste se presenta en forma de gránulos insolubles de liberación lenta, en cuyo interior se encuentran las bacterias beneficiosas para el terreno", concluyó.
