VALENCIA 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ex conseller de Obras Públicas y Transportes entre 1990 y 1995 y ex delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana Eugenio Burriel manifestó hoy en las Corts Valencianes que en aquellos años "hicimos lo que tocaba hacer" de acuerdo con las "exigencias del momento", a lo que añadió que a "nosotros el accidente no nos pasó" y aseguró que, de haberse producido durante su mandato, habría presentado la dimisión.
Burriel, que fue el primero en intervenir en la segunda jornada de comparecencias de la comisión de investigación sobre el accidente del pasado 3 de julio en la línea 1 del metro de Valencia, que ocasionó la muerte de 43 personas, incidió en que hace 15 años "hicimos lo que tocaba hacer; no sé si después ha sido igual, creo que no", aseveró.
El actual secretario de Territorio del PSPV destacó que el PP "lleva 11 gobernando en la Comunitat" y, por ello, acusó a los populares de haber demandado su comparecencia para intentar "quitarse el problema de encima", a lo que añadió que los ciudadanos "perdonan muchas cosas pero lo que no perdonan es que se les quiera tomar el pelo".
En este punto, citó las palabras de un diputado del PP que reprochó a la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, que "insinuara" durante una intervención en el Congreso de los Diputados sobre una máquina que se quedó atascada en el túnel de San Pedro del AVE Madrid-Valladolid, realizado durante el Ejecutivo popular, incidió Burriel, que la responsabilidad de lo ocurrido era del PP, "y dijo que si a los dos años de estar en el Gobierno, la ejecución de las obras es responsabilidad del PP es que no quieren ser responsables de nada".
Manifestó que durante la etapa socialista se realizó un "impulso enorme a la modernización para crear una red de metro" y, al respecto, incidió en que los vagones que ahora "están viejos, nosotros los pusimos nuevos, y entonces eran lo mejor del mercado", a la vez que destacó que introdujeron mejoras en la señalización, las vías y las estaciones y habilitaron nuevos talleres, entre otras.
"Hicimos lo que nos tocaba hacer, con las exigencias del momento", apuntó Burriel, y añadió que a "nosotros el accidente no nos pasó". Manifestó que el resultado de un sistema formado por las inversiones, el material, las infraestructuras y el factor humano "no falló, y en 2006 ha fallado".
Además, señaló que hablar del trazado de la línea "no tiene sentido" porque trazados y curvas hay en todas las redes ferroviarias, dijo, y apuntó que el de la Línea 1 "no era un mal trazado, fue un gran avance, loado en todos los sentidos" y sólo fue criticado por la oposición por su "tardanza".
También manifestó que la línea 1 era una "línea de cercanías, claro que lo era, pero ahora es otra cosa", recalcó, ya que a "partir de 1998 y 1999 cambió completamente su funcionalidad" al llegar a la estación de Angel Guimerá, con lo que, según remarcó, "se convierte en una red de metro". En este sentido, señaló que cuando presentó la línea en febrero de 1990 dijo que de los 18 millones de viajeros con los que contaba en ese momento llegaría a 50 millones y "hoy son 60 millones porque esa línea forma parte de una red".
"SE HAN EQUIVOCADO POLITICAMENTE"
Burriel apuntó que ello supone "unas exigencias técnicas" a las que los populares "no han sabido dar respuesta". "Se han equivocado políticamente y no han adoptado las medidas adecuadas", incidió el ex conseller.
También manifestó que durante su etapa se encargaban los vagones conforme eran necesarios para abrir nuevos tramos, si bien indicó que en la actualidad "está prácticamente terminado el tramo hasta Quart y no lo pueden poner en servicio porque no tienen trenes y para cuando concluyan la conexión con el aeropuerto sólo contarán con una unidad". Asimismo, señaló que el porcentaje dedicado a mantenimiento es "menor en relación con el porcentaje de inversiones" e indicó que en estos momentos "no sabemos cuántas revisiones se hacen anualmente", ya que esos datos no se hacen públicos.
Señaló que el material móvil "no se renueva a tiempo y eso lleva a una presión" debido a que su uso "se fuerza". Aseguró que era usuario habitual del metro e indicó que en los últimos diez años "he ido viendo y viviendo el proceso de degradación del metro", un medio de transporte que usan las "clases populares", dijo, por lo que, a su juicio, "no es extraño que no haya sido la prioridad" del PP, a quien acusó de manifestar una "desgana por lo público". Añadió que ni en frecuencia, ni en material ni en seguridad "la línea 1 ha mejorado y eso obedece a una decisión política".
El responsable socialista incidió en que si durante su etapa como conseller hubiera recibido las "quejas continuas de usuarios, de los alcaldes y de los sindicatos" y, sobre todo, hubiera ocurrido el "grave accidente" de Picanya (Valencia), "donde tres personas se saltaron el semáforo, hubiera revuelto Roma con Santiago en esa empresa para saber qué pasaba y para que las cosas empezaran a cambiar".
Aseguró que de haber sufrido un siniestro como el del pasado 3 de julio, él y su equipo habrían presentado la dimisión para "asumir la responsabilidad política que corresponde", como la asumieron otros socialistas como Antoni Asunción, el director general de Transportes de la Generalitat de Catalunya y la consejera de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, afirmó, y "para facilitar la recuperación de la confianza de los ciudadanos en el transporte público" y "no ser juez y parte en la subsiguiente investigación que tiene que aclarar lo que pasó".
Recalcó que, en su caso, su "principal preocupación sería no ver quién tiene la culpa" del siniestro "sino ver en qué he fallado yo". Señaló que esto supone "otra manera de gobernar y de interesarse por lo público, pero cada uno tiene una manera de entender las cosas". "Hay dos maneras de hacer las cosas, antes y después de 1996", recalcó, y expresó su deseo de que pronto "vuelva esa otra manera de gobernar".
Por su parte, el portavoz del PP, Serafín Castellano, señaló que ha habido "dos etapas" en la línea 1, "una de inversión en infraestructuras y de mejoras y otra que dejaba mucho que desear", a la vez que incidió en que la historia "no empieza con el PP" y acusó a Burriel de haber estado "a la defensiva" durante su intervención en lugar de responder a las preguntas formuladas por los populares sobre las características de la línea 1 durante la etapa socialista.
Por otro lado, al inicio de su comparecencia, que fue seguida desde la sala por el portavoz del PSPV, Joan Ignasi Pla, Burriel explicó que acudía a la Cámara por "voluntad", ya que aseguró no haber recibido ninguna notificación por parte de la Cámara. El presidente de la comisión, Rafael Maluenda, del PP, indicó que los servicios de las Corts intentaron ponerse en contacto con él en su casa y se le remitió un 'bureau fax' y, además, dijo, se consensuó la hora y el día de la comparecencia con diputados socialistas.