VALENCIA, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El pleno de las Corts Valencianes rechazó hoy una iniciativa del PSPV que reclamaba que la Cámara instara al Consell a elaborar un plan extraordinario de infraestructuras para la Comunitat, de colaboración público-privada, de características similares al del Gobierno de España y que permitiera "avanzar la licitación de obra pública al presente año 2010 y al año 2011". La iniciativa contó con los votos a favor de socialistas y Compromís y en contra del PP y No Adscritos.
El diputado del PSPV Francesc Signes manifestó que la proposición no de ley de su grupo busca que la Generalitat "mueva ficha para recuperar el ritmo inversor en infraestructuras, sometido casi a respiración asistida" y con un "desplome" en la licitación de obra pública por parte del Consell "muy grave"
Para ello, aclaró que el plan propuesto no busca "licitar ninguna actuación financiada a través del cobro de ninguna tarifa al usuario, que no tendrá que pagar ningún peaje", sino que se trata de la elaboración de un "modelo global, negociado y pactado" con la Cámara de Contratistas de la Comunitat Valenciana y con Fecoval --que agrupa a las empresas contratistas de obras con la Administración-- que permita "licitar obra por el sistema concesional".
Apuntó que, según este modelo, las empresas privadas ejecutarían las obras y se ocuparían de los trabajos de conservación y mantenimiento de las infraestructuras durante el período de la concesión y sería la Administración, a través de un canon anual, la que pagaría la obra ejecutada y los trabajos de conservación. Indicó que el modelo de financiación público-privado de la Junta de Andaludía "ha conseguido compromisos financieros por 4.500 millones de euros y el pasado mes de noviembre firmó un convenio de colaboración con 40 entidades financieras".
Se preguntó cómo piensa el Consell financiar el nuevo Plan de Infraestructuras Estratégicas (PIE) 2010-2020 que mañana presentará el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y defendió que éste sólo podrá cumplirse si se acompaña de un plan global como el que propone su grupo.
El diputado del PP Antonio Lorenzo expresó sus "dudas" de que los 17.000 millones de euros de inversión que prevé el plan estatal "se lleven a la práctica en dos años" en colaboración con empresas privadas y entidades financieras "en los momentos en que estamos" y "sin concretar actuación alguna".
Asimismo, destacó que el nuevo PIE que mañana presentará el jefe del Consell "está en la línea del PIE 2004-2010 y colaborará en la creación de empleo".
Recalcó que el Plan Confianza está aportando 415 millones de euros para obra pública, y subrayó que el presupuesto de 2010 aumentó en un 3 por ciento respecto a 2009. Señaló que aunque la licitación disminuyó en 2009 un 18,5 por ciento en la Comunitat, en otras autonomías como Andalucía bajó un 22,8; en Cataluña, un 23,4 y Castilla-La Mancha un 37,7, a pesar de ser comunidades que cuentan con "ayudas del Estado que no percibimos los valencianos".
La parlamentaria de Compromís Mònica Oltra se mostró a favor de la iniciativa socialista, "aunque no entra en el fondo" de las "líneas maestras" que propone, aseveró, pero defendió la elaboración de un plan de infraestructuras sostenibles y afirmó que aunque el PP asumiera la propuesta del PSPV "no tendría como objetivo principal ése sino hacer más ricos a los que ya se han hecho ricos más allá de procurar el interés general".
La diputada del grupo de No Adscritos Marina Albiol justificó el rechazo a la iniciativa del PSPV porque el plan propuesto es "inútil para la creación de empleo digno, no especifica qué infraestruturas propone y sólo hace referencia al plan del Gobierno estatal basado únicamente en hacer carreteras", al tiempo que supondría aumentar el endeudamiento de la Generalitat, apuntó.
