Cultura.- Blasco de Alagón restaura un lienzo del siglo XVII de la Iglesia del Ángel de la Vall d'Uixó

Actualizado: martes, 27 mayo 2008 15:51

CASTELLÓN, 27 May. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Blasco de Alagón está restaurando un lienzo del siglo XVII procedente de la Iglesia del Ángel de la Vall d'Uixó (Castellón), de grandes dimensiones, con 224 centímetos de alto por 167 centímetros de ancho, que representa al Apóstol Santiago el Mayor o 'Santiago Matamoros' y cuya autoría se desconoce, según informaron en un comunicado fuentes de la fundación.

La escena que se representa está basada en la leyenda de la aparición de Santiago el Mayor que, montado en su blanco corcel, fue decisiva para la victoria de las tropas cristianas en la batalla de Clavijo (La Rioja), en el año 844, en pleno período de la Reconquista. De hecho, la figura de Santiago alude al perfecto soldado de Cristo y a la Iglesia militante, representando de un modo aleccionador de cómo deben comportarse los fieles.

El estado de conservación de la obra era, en general, deficiente, ya que además de los daños producidos por el envejecimiento continuo, natural e inevitable de los materiales, se puede observar una restauración anterior que ha provocado y añadido más problemas a los ya existentes.

La aparición de estucos procedentes de una anterior restauración se puede observar en toda la zona perimetral del lienzo, ya que presenta diferente textura y distintos repintes.

Además, el propio bastidor sobre el que fue realizado el óleo también presenta daños propios que hacen que deje de cumplir su función como sostén de la obra. Ejemplos de estos daños son la afección de un ataque de carcoma, roturas y nudos. Por otra parte, el bastidor presenta como sistema de tensión dos cuñas que ya no cumplen el cometido para el que fueron empleadas en un primer momento.

La intervención que se está realizando en la Fundación Blasco de Alagón a cargo de la Dirección Técnica de Paula Gisbert y la restauradora Beatriz Recatalá comenzará con una protección de la pintura con papel japonés y una resina sintética termoplástica a baja concentración que permita adherir las capas superficiales y conceder una mínima protección al anverso del lienzo.

Tras esto, se interviene en el reverso del soporte, desmontando el bastidor para reponerlo después con uno nuevo y poder limpiarlo y sanearlo.

Probablemente será necesaria la aplicación de un reentelado de bordes, ya que éstos se encuentran deshilachados y rotos en algunas partes. También se procederá a la eliminación de los repintes que se superponen a la pintura original, así como de los estucos que se encuentran en la zona perimetral del lienzo y que no aportan beneficio alguno al mismo.

Por último, se limpiará la superficie pictórica con diferentes disolventes y se realizará una reintegración cromática mediante pinturas de base acuosa. Para finalizar con la restauración se aplicará un barniz de protección final mediante geógrafo de manera que deposite muy poco residuo sobre la superficie.

En cuanto a la composición de la obra se puede decir que es una representación bastante dinámica presidida por la figura de Santiago ataviado con una armadura plateada montando en su caballo y blandiendo la espada en tono amenazante sobre la amalgama de cuerpos y extremidades de los infieles musulmanes. Éstos se encuentran situados en la mitad inferior de la composición, aportando un mayor peso a la escena.

Además, se puede observar un nutrido grupo de enemigos, debajo del centro del lienzo, matizados en tonalidades grises que provocan sensación de profundidad y describen con sus gestos la matanza que allí tuvo lugar. Sobre el pecho del apóstol se encuentra representada la Cruz de Santiago, denominada así en el siglo XII como emblema de la orden militar y religiosa que lleva su nombre.

La insignia es una cruz gules roja que simula una espada con la forma de la flor de lis en la empuñadura y los brazos. Al fondo se puede observar una fortaleza que probablemente sea la muralla de Clavijo, como referencia al lugar donde ocurrieron los hechos.