Cultura.- El González Martí repasa 50 años de la obra "innovadora" de Lluís Castaldo con 70 piezas de pintura y cerámica

Actualizado: jueves, 9 julio 2009 17:38

VALENCIA, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Museo Nacional de Cerámica González Martí repasa la trayectoria de Lluís de Castaldo desde sus primeras incursiones en la pintura, su paso por los murales arquitectónicos y hasta llegar a una cerámica que rompe la funcionalidad en favor del arte y el impacto del color y las texturas. A lo largo de 70 obras, divididas en varias etapas, se podrá seguir la evolución del creador durante más de 50 años de trabajo en los que siempre innovó en cuanto a formas, esmaltes y sentido del arte.

Desde mañana y hasta el 27 de septiembre, la antología 'Castaldo. De la pintura a la cerámica' que fue presentada hoy por el propio artista, la comisaria Carmen González, y el director del museo valenciano, Jaume Coll, el visitante podrá descubrir como los orígenes pictóricos del artista, nunca le abandonaron en su etapa de ceramista, en la que traslada sus cuadros a los objetos tridimensionales, fundamentalmente jarrones.

La llamada 'frontalidad' es una de la principales características de la obra de este creador mallorquín, que logra llamar la atención sobre un punto concreto de cada pieza, pintando en él o rompiendo su forma tradicional. Así, muestra jarrones pintados por una zona, o con un roto e incluso con hundimientos que simulan el ombligo. Y todo ello, a través de diferentes texturas que van desde esmaltes luminosos hasta apariencias secas, que juegan con los colores.

Fotografías, correspondencia, bocetos y notas, acompañan las creaciones, y explican cómo se van desarrollando las ideas del artista, desde conceptos que se repiten como su fijación por las curvas, su acercamiento a la naturaleza o la mutación de las formas a las que somete a los objetos y que lo identifica por ejemplo en los llamados jarrones 'con cintura'.

Para Castaldo, el paso de la pintura a la cerámica se produjo en una época de grandes murales arquitectónicos y a partir de ahí, descubrió "la cerámica, nuevas puertas, nuevas posibilidades", explicó. Surge de la "necesidad de aplicar la pintura a otros soportes", y es entonces cuando descubre en la cerámica "toda una galaxia" por la que siente "fascinación total".

Tanto es así, que "después de 50 años metido en el mundo de la cerámica, todavía siento las mismas ganas y la misma ilusión" y después de todo este tiempo "siempre he abierto y cerrado un horno con el mismo miedo y la misma ilusión", incidió.

En su opinión, "la cerámica tiene vida propia", ya que "según la acaricie la luz, el exterior o la lluvia, su aspecto es distinto, adquiere nuevas dimensiones y provoca otras sensaciones", resaltó.

Sin embargo, Castaldo lamentó que "es muy difícil conseguir que la cerámica se vea como un proceso creativo como lo es un poema, una obra de teatro o un cuadro. En general, la sociedad no traspasa la funcionalidad y a ello se suma que la falta de interés de muchas instituciones" que no se arriesgan a abrir las puertas a la vanguardia cerámica.

En este sentido, la comisaria de la muestra achacó el desinterés a la "más al desconocimiento que a otra cosa", ya que entre los expertos y en mercados de arte, la cerámica sí está muy bien considerada y valorada económicamente, apuntó.

Por último, Carmen González quiso resaltar la "innovación" de Lluís Castaldo "siempre a contracorriente" de lo que se hacía en el arte en esos momentos, ya que, cuando en Europa todos parecían "obsesionados" por las teorías orientales, y en alcanzar la belleza, Castaldo "lo cuestiona todo" y rompe las formas.