VALENCIA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El mural que el artista valenciano, Joaquín Michavila pintó en el portal de una vivienda en la calle Literato Gabriel Miró de Valencia se restaurará y se trasladará a las nuevas instalaciones de la Conselleria de Cultura para darle una mayor difusión y para atajar el deterioro de una pintura con "un gran valor artístico, sentimental e histórico".
Así lo explicó hoy el secretario autonómico de Cultura, Rafael Miró, durante una visita a las obras de desmontaje de la pieza en la que estuvo acompañado por la directora general de Patrimonio, Paz Olmos, la directora del Institut Valencià de Conservació i Restauració de Béns Culturals, Carmen Pérez, y el propio autor de la pintura, Joaquín Michavila.
En este sentido, Miró subrayó que el objetivo de la Conselleria es "recuperar la obra y darle una difusión para que lo puedan ver todos los valencianos", por lo que se ha estudiado la posibilidad de colocar el mural en el nuevo edificio que ocupa la Conselleria de Cultura, en la Avenida Campanar de Valencia.
Así, consideró que una de las causas que ha movido la actuación es "el nivel de deterioro que se alcanza en estas obras de arte cuando están expuestas al público general", mientras que en el edificio público "va a estar mucho más controlado al no exponerse a los ataques de las personas".
Al respecto, Pérez añadió que los principales deterioros de la obra son "agresiones antrópicas", como "rayas hechas con un punzón", es decir "las clásicas gamberradas y chiquilladas que le estaban perjudicando", apuntó.
"EFECTO ESCAPARATE"
Asimismo, el secretario de Cultura agradeció el gesto de los vecinos --que han decidido ceder el mural-- porque "puede tener un efecto escaparate para que otros valencianos vean la importancia que tiene mantener y recuperar estos manifestaciones artísticas". De este modo, animó al resto de valencianos que se encuentren en una situación parecida a colaborar con las instituciones para la recuperación. Miró instó a los vecinos para que "tomen ejemplo" y para que esta actuación "se pueda materializar y reproducir en más casos".
Por su parte, uno de los miembros de la comunidad de vecinos, José María Dural, explicó que se va a aprovechar las obras de anulación de las barreras arquitectónicas para "regalar este mural que hemos disfrutado durante 48 años" con el fin de que "miles de personas puedan visitarla". Sin embargo, Pérez puntualizó que el edificio que los vecinos no perderán el mural puesto que les pondrán una réplica a tamaño natural.
El presupuesto de la actuación es de 18.000 euros y, según la directora del Institut Valencià de Conservació i Restauració de Béns Culturals, el plazo de restauración será de seis meses desde que llegue al Instituto hasta que esté en condiciones de trasladarlo a la Conselleria. El muro se cortará en cuatro trozos para no molestar en exceso a los vecinos y se solucionarán todos las agresiones para que la obra vuelva a tener su aspecto original.
Michavila recordó que la obra, que se pintó en los años 60, "no tiene ningún sentido concreto, sino que pretende producir un placer estético". Asimismo, explicó que se representa el jardín del edén como "lo antepuesto a la rigidez arquitectónica del portal". El creador manifestó "una gran alegría" ante la puesta en marcha de esta restauración porque "está muy bien que las instituciones se preocupen por una obra menor". El artista está de acuerdo con llevar la obra a otro lugar donde "la gente la pueda disfrutar y criticar".
