VALENCIA 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
El productor independiente Lluís Miñarro --quien ha participado en proyectos de directores como Isabel Coixet, Manoel de Oliveira, Marc Recha, José Luis Guerin o Albert Serra-- criticó hoy que existe una "maniobra insana por denostar el cine español" a pesar de que éste se encuentra en un momento "muy enriquecedor".
Miñarro realizó estas declaraciones en Valencia, donde la Filmoteca del Instituto Valenciano del Audiovisual y la Cinematografía (IVAC) ha organizado un ciclo en homenaje a su labor, que incluye la proyección de toda su filmografía como productor y de los dos filmes que ha dirigido él mismo.
El productor comentó, en una entrevista concedida a Europa Press, que "a nivel mediático el cine español bastante denostado", lo que contrasta con la visión que hay, por ejemplo, en Estados Unidos, donde conocen nombres como Almodóvar, Amenábar, Penélope Cruz o Javier Bardem.
En cambio, dijo, en España hay "una especie de desvalorización de lo nuestro que ocurre también en el caso del cine", un fenómeno "muy dañina pero también muy propio de la manera de ser de este país, donde nos acuchillamos los unos a los otros", dijo Miñarro, quien consideró que "hay que prescindir de esta dinámica y hacer películas interesantes".
En este punto, apostó también por "mirar hacia otros sitios, porque el cine español no se acaba en el territorio de España" aunque reconoció que "cuesta mirar hacia fuera y es un aprendizaje que se ha de hacer de forma colectiva".
A pesar de esto, Miñarro defendió que la creación nacional se encuentra "en un momento enriquecedor, con mucha gente que ya ha nacido con la imagen". Además, apuntó que los períodos de crisis como el actual "revolucionan cosas" y puso como ejemplo que durante la gran depresión de Argentina de 2001 salieron "las mejores propuestas cinematográficas", muchas de ellas de nuevos directores y el 45% de mujeres realizadoras, "un caso atípico en el panorama internacional", observó.
Sobre la posible oposición entre las películas de las grandes productoras y las cintas independientes, Miñarro se mostró convencido de que "una cosa no va a hacer desaparecer a la otra" pero sí que ocurrirá que el cine de autor "se va a 'guetizar', de hecho ya lo está en las cinematecas". "Quizá en el futuro, aunque a mí no sea el sitio que más me gusta, acabará en los museos o centros de arte, pero siempre buscará salidas para seguir existiendo", agregó.
En esta línea, manifestó que el cine "tiene dos facetas, el espectáculo, Meliès en un principio y ahora 'Avatar', pero también una respuesta personal, más íntima de un autor". Pero "lo importante de una película es que en algún momento, sea una producción grande e industrial o una artesana y pequeña, es que emocione, que mueva", subrayó.
Sobre las medidas que, a su parecer, habría que tomar para ayudar al cine español abogó por que este arte "empiece a integrarse a través del Ministerio de Educación en las escuelas". "El gran problema es que no hay una formación de los lenguajes cinematográficos en las nuevas generaciones; en los colegios se habla de literatura y de artes plásticas pero no de cine en pleno siglo XXI cuando precisamente es el arte de nuestro tiempo". "En vez de copiar lo que se hace en Francia aquí todavía queremos inventar la sopa de ajo", ironizó.
Interrogado por si la industria española podría sobrevivir actualmente sin las ayudas europeas contestó con un rotundo no. "Del dinero publico que va cultura el cine representa sólo el 17 o 18 por ciento, lo que pasa es que está muy mediatizado y se cacarea mucho el tema del cine, pero todas las artes están subvencionadas. La Unión Europea es la Europa de las subvenciones y para el cine es la única manera de existir frente a la dinámica aterradora y la apisonadora que representa el cine americano", argumentó.
PROPUESTAS EN VALENCIA
Finalmente, y acerca de la posibilidad de descentralizar la producción cinematográfica en España, señaló que "está pasando pero muy tímidamente" y destacó que "en Valencia cada vez hay más y mejores propuestas cinematográficas". "Creo que la Generalitat valenciana está apostando por ello y, por supuesto, ha de apostar la televisión autonómica", incidió.
Añadió que, "por desgracia, ha habido una desaparición de las salas de versión original que ha hecho que en los lugares que no son Madrid y Barcelona sólo se exhiba el cine de gran formato, algo muy preocupante porque mas de la mitad de la población no tiene acceso a otras propuestas". "Es aquí donde los gobiernos autonómicos deberían crear una red de pantallas amigas paralela que sirviera para mostrar el cine que no quieren proyectar las salas comerciales porque no es rentable", concluyó.