Cultura.- Las 'Tamboradas' comienzan el camino de su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad

Tamborada de Hellín
EUROPA PRESS/DAVID FLORES
Actualizado: sábado, 9 abril 2011 19:14

VALENCIA, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -

La directora general de Patrimonio Cultural Valenciano, Paz Olmos, ha acudido a la Jornada de Exaltación del Tambor y el Bombo de la ciudad de Alzira (Valencia), donde ha querido hacer visible el compromiso entre la Generalitat, el Ayuntamiento de Alzira y las Cofradías y Hermandades de la Semana Santa Alzireña, representados por su presidente Vicente Fabregues, para apoyar la candidatura de las 'Tamboradas' a inscribirse en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.

Esta candidatura fue impulsada por la Junta de Castilla-La Mancha. A esta propuesta se sumaron Andalucía, Aragón, Murcia y la Comunitat Valenciana, que también cuentan con esta fiesta de carácter etnográfico y antropológico.

Así pues, esta candidatura aúna las tamboradas de 17 localidades españolas. Se trata de Hellín, Agramón y Tobarra, en Castilla-La Mancha; Baena en Andalucía; Albalate del Arzobispo, Alcañiz, Alcorisa, Andorra, Calanda, Híjar, La Puebla de Híjar, Samper de Calanda, y Urrea de Gaen en Aragón; Moratalla y Mula en la Región de Murcia; y Alzira y L'Alcora en la Comunitat, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

La candidatura cuenta con el apoyo de todos los grupos del Senado, que el pasado 9 de marzo suscribieron una enmienda transaccional a la moción que presentaron de forma conjunta, en la que la Cámara Alta se adhiere al expediente para la inscripción en la Lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco de la candidatura conjunta de estas 'Tamboradas'.

Las 'Tamboradas' son rituales colectivos basados en el toque simultáneo, intenso y continuado de miles de tambores y bombos, que comparten y compiten en virtuosismo en espacios públicos urbanos en el marco temporal de la Semana Santa y Cuaresma.

Estos actos aúnan en sí numerosos valores culturales y etnológicos, desde la creación de un espacio sonoro identitario y singular, hasta el fomento y conservación de la artesanía local a través de la confección de los instrumentos y la indumentaria, diferentes en cada una de las localidades en las que se celebran tamboradas. Además, es importante el valor democrático de estos actos, puesto que la única seña de distinción entre los participantes es su virtuosismo en la percusión, lo que fomenta los valores de igualdad y respeto.