ALICANTE 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Alicante realiza a través de Alicante Natura un programa de cría de águilas reales en el espacio natural Peñas de Sol, en Villena, que contempla el seguimiento de las parejas reproductoras y la adaptación del enclave a las características del hábitat de esta especie, según ha informado en un comunicado la institución provincial.
Así, un macho y una hembra han regresado al nido existente en la zona tras varios años de ausencia y han logrado sacar adelante a un recién nacido, que ya ha completado su desarrollo y vuela con los adultos por las inmediaciones. El pequeño será alimentado por sus padres hasta que aprenda a cazar y sea capaz de independizarse y buscar un territorio propio.
El diputado de Medio Ambiente, Javier Sendra, ha explicado que la reproducción de estos dos ejemplares es un dato "muy positivo, que pone de manifiesto la importancia de este programa y que permite ser optimistas respecto al futuro de esta majestuosa y emblemática rapaz tan característica de los montes" alicantinos.
El águila real habita en zonas montañosas del interior de la provincia, donde busca amplios territorios con abundante caza y lugares adecuados para anidar. Al igual que el resto de aves rapaces, se encuentra estrictamente protegida, estando amenazada principalmente por la desaparición y alteración de su hábitat.
CARACTERÍSTICAS DE LA ESPECIE
Esta especie suele disponer dentro de su territorio de varios nidos que van utilizando alternativamente. Normalmente los instalan en paredes rocosas inaccesibles, en las que construyen una plataforma con ramas bastante voluminosas. Por su parte, las hembras ponen de uno a tres huevos, aunque lo habitual suelen ser dos, que incuban durante 40 días.
De este modo, tras el nacimiento, los pollos permanecen en el nido aproximadamente dos meses, momento en el que comienzan a volar junto a sus padres y aprenden a cazar hasta adquirir su total independencia. Al igual que otras aves, la puesta de dos huevos responde a una estrategia reproductora, de modo que en años considerados "buenos" conseguirán sacar adelante a los dos recién nacidos, mientras que en años "malos", sólo el primero, el más grande, será el que prospere.