VALÈNCIA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Fran Quesada, ha avanzado este lunes que la Generalitat, a través de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, destinará 25 millones de euros para eliminar los ruidos y los olores que genera la actividad de depuradora de la pedanía valenciana de Pinedo a los vecinos del entorno.
Igualmente, se prevé cambiar la entrada "para evitar el paso de vehículos pesados" y así los ruidos y molestias que su tránsito provoca en el núcleo de población cercano a la depuradora. Estas "mejoras" forman parte del Plan Especial que la administración autonómica elabora para minimizar el impacto y los efectos negativos" de la actividad de la instalación de Pinedo.
Quesada se ha pronunciado de este modo, en declaraciones a Europa Press, después de que los vecinos de esta pedanía que denunciaron ante los tribunales la actividad de la depuradora y las molestias que les ocasiona decidieran este domingo por unanimidad pedir al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) la ejecución de la sentencia en la que ordena el cierre de la fase III de esta infraestructura.
Representantes de estos vecinos y su abogado han acudido este lunes a la Ciudad de la Justicia de València para presentar el escrito en el que reclaman al TSJCV la ejecución de dicho fallo.
"Desde la Conselleria de Medio Ambiente entendemos que no es razonable el cierre debido a los perjuicios, sobre todo, medioambientales que pueden producirse", ha expuesto Fran Quesada.
El responsable autonómico ha coincidido en este planteamiento con el concejal del Ciclo Integral del Agua en València y presidente de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi), Vicent Sarrià, que este lunes ha reiterado la "imposibilidad" de cerrar la depuradora de Pinedo "por razones medioambientales", dado que esto "supondría tirar al mar las aguas residuales de 1.200.000 personas".
Quesada ha señalado que esos problemas se extendería "no solo a la Albufera, uno de los principales problemas que tenemos ahí, sino también a las playas a través del emisario" submarino, incluido junto al colector Oeste, en el sistema de esta depuradora.
Del mismo modo, ha indicado que "se debe tener en cuenta que las emisiones de dbo, que actualmente por ley se especifica que tienen que estar en 25 miligramos, si se cerrara la depuradora pasarían a 176, siete veces más" y ha expuesto que "los sólidos en suspensión, para los que máxima autorizada en vertido está en 35 miligramos, pasaría a 112".
El secretario autonómico ha comentado que estas precisiones forman parte de un informe que fue emitido en febrero de 2017 por la Dirección General de Aguas y dirigido al Ayuntamiento de València para que fuera adjuntado al expediente que se remitió al juzgado con el fin de que "el juez conociera de primera mano cuáles son los perjuicios" del cierre de Pinedo.
Fran Quesada ha avanzado que esta tarde se celebrará una reunión con los vecinos denunciantes de Pinedo para "volver a explicar esto" y que puedan "ver de primera mano el informe, el Plan Especial de Pinedo y las mejoras que se establecen".
"Aproximadamente estamos hablando de un poco más de 25 millones de euros. Concretamente, de 10 millones relacionados con medidas ambientales para eliminar los ruidos y los olores" y de "15 millones destinados a medidas de eficiencia energética", ha expuesto.
Respecto a estas últimas el secretario autonómico ha citado como ejemplo la sustitución de unas turbinas por difusores, una actuación que permitirá "ahorrar energía" y también suprimir olores. En cuanto al ruido ha manifestado que se intentará reducir "al máximo" también el provocado por el tráfico al cambiar "la entrada, para evitar el paso de vehículos pesados".
"SOLUCIONADO CIEN POR CIEN"
Quesada ha agregado que la planta de Pinedo "tiene 30 años de existencia", por lo que "está un poco vieja". En cuanto a la salida que se debe plantear frente al cierre y para eliminar las molestias actuales, ha subrayado que debe ser "una solución corresponsable entre todas las partes" implicadas.
"Medio Ambiente está haciendo lo suyo y el resto también su faena", ha declarado, al tiempo que ha afirmado que calcula que "a finales de verano de 2019 el tema estará solucionado cien por cien".
